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MÉXICO, DF., 17 de diciembre de 2013.- La Ronda Cero será la primera aplicación concreta de la Reforma Energética avalada por el Constituyente Permanente para ser una realidad en el país, pues será en marzo cuando Petróleos Mexicanos (Pemex) reporte a la Secretaría de Energía los yacimientos de petróleo y gas que trabajará solo, los que explotará en asociación con algún particular y en los que dejará a las empresas particulares solas.
De acuerdo con el senador panista Jorge Luis Lavalle, es altamente probable que Pemex se quede en los yacimientos de aguas someras, donde es una potencia tecnológica, y escoja asociarse con diversas empresas en aguas profundas del Golfo de México, mientras que dejará que sean los inversionistas particulares quienes vayan, mayoritariamente, por los yacimientos de gas shale.
El Senado establece en la exposición de motivos de la Reforma Energética que cada pozo en aguas profundas tiene un costo aproximado de entre 150 y 200 millones de dólares (de mil 995 millones a dos mil 660 millones de pesos, con un tipo de cambio de 13.30 pesos por dólar).
Esto implica que los 137 pozos perforados en Estados Unidos durante 2012 demandaron una inversión de entre 20 mil 550 millones de dólares y 27 mil 400 millones de dólares.
Trabajar en esas áreas para sacar petróleo requiere de tecnología avanzada y, por eso, es altamente probable que Pemex decida ir en compañía de las empresas transnacionales, de acuerdo con la estimación del legislador panista.
Por eso, la reforma constitucional establece los criterios que deberán seguirse para que Pemex tenga la ventaja de la llamada Ronda Cero, que implica el derecho de la petrolera mexicana a ser la primera empresa en escoger los yacimientos donde trabajará.
Pemex tendrá 90 días para informar a la Secretaría de Energía su decisión, y acreditar que cuenta con las capacidades técnicas, financieras y de ejecución necesarias para explorar y extraer los hidrocarburos de forma eficiente y competitiva.
A su vez, detalla el modelo aprobado por el Senado, la Cámara de Diputados y hasta ayer por una veintena de Congresos estatales, para los yacimientos donde Pemex haya realizado descubrimientos comerciales o inversiones en exploración; así será posible que, con base en su capacidad de inversión y sujeto a un plan claramente establecido de exploración de cada área asignada, continúe con los trabajos en un plazo de tres años.
Este periodo es prorrogable a dos años, en función de las características técnicas del campo de que se trate y del cumplimiento del plan de exploración, y en caso de éxito, continúe con las actividades de extracción; de no cumplirse con el plan de exploración, el área en cuestión deberá revertirse al Estado.
También explica que Petróleos Mexicanos mantendrá sus derechos en cada uno de los campos que se encuentren en producción a la fecha de la entrada en vigor de la reforma constitucional, que se espera para finales de esta misma semana.
“Al igual que para las asignaciones de exploración, en este caso se contempla que Petróleos Mexicanos deberá presentar un plan de desarrollo de los campos en cuestión, que incluya descripciones de los trabajos e inversiones a realizar, justificando su adecuado aprovechamiento y una producción eficiente y competitiva”, se indica en la Reforma Energética.
Para cada asignación de extracción de hidrocarburos, añade, se podrá establecer la profundidad en cada asignación, de forma que las actividades extractivas puedan ser realizadas, cor el fin de maximizar el desarrollo de los recursos prospectivos en beneficio del país.
“En caso de que, como resultado del proceso de adjudicación de asignaciones para llevar a cabo las actividades de exploración y extracción de petróleo y de los hidrocarburos de hidrógeno sólido, líquido o gaseoso se llegaren a afectar las inversiones de Petróleos Mexicanos, éstas serán reconocidas en su justo valor económico, en los términos que al efecto determine la Secretaría del ramo en materia de Energía.
“Asimismo, se prevé la posibilidad de que el Estado determine una contraprestación al realizar una asignación y éstas no podrán transferirse sin la aprobación de la dependencia referida”, detalla la reforma en las reglas que privilegian el derecho de Pemex a escoger qué va a trabajar.