Recibe Pablo Lemus su constancia como gobernador electo
XALAPA, Ver., 17 de diciembre de 2013.- El exdiputado local y dirigente del Movimiento Izquierda Veracruzana (Miver), Manuel Bernal Rivera informó que el PRD iniciará la batalla legal en tribunales para revertir la reforma energética de Enrique Peña Nieto.
Añadió que está a la espera de las directrices que marque su parido, el PRD, para saber qué otras medidas de presión se aplicarán para echar abajo la citada reforma.
Entrevistado al término de la rueda de prensa que organiza cada martes, el perredista dijo que aunque el PRI y el PAN se pusieron de acuerdo para vender al país, muchos mexicanos no están de acuerdo en esas acciones y con toda seguridad, saldrán a las calles a exigir que se eche abajo la citada reforma.
Lamentó que en el Congreso de la Unión no haya legisladores responsables que tengan en la mira beneficiar al país, sino poner a la venta lo poco que le queda. Aunado a ello, dijo que esa decisión provocará que haya más desigualdad entre los mexicanos, pues habrá pocos ricos y muchos pobres.
Por ello es que confían en que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) echará abajo la reforma energética: “Nosotros estamos a favor del progreso, pero no a costa de perder lo poco que nos queda. No queremos que se violente nuestra soberanía y mucho menos que los extranjeros tomen algo que no es suyo”, dijo.
La peor Xalapa de la historia
Tras el informe que brindó el lunes la alcaldesa Elizabeth Morales, el líder del MIVER aún se pregunta qué Xalapa es la que presentó en su informe la presidente municipal.
Dijo que en tres años, Morales García no resolvió los graves problemas de recolección de basura, ni los baches que hay en toda la ciudad, ni muchos menos los problemas de agua y saneamiento: “Hay que agregar que los turistas jamás llegaron y debo profundizar en cuanto al saneamiento, que acarrea una deuda histórica de más de 500 millones de pesos. No sabemos en qué terminó todo”, añadió.
Al día de hoy, poco queda de Xalapa, dijo, pues la alcaldesa se pasó tres años sin hacer nada y hoy, a pesar de ser una de las capitales menos favorecidas, sólo la historia y la cultura pueden salvar a la ciudad del desprestigio nacional, culminó.