Números Rojos

En la mañana del sábado era la gran noticia en las redes sociales: La caída de “El Chapo”.
Todos lo decían, lo compartían, hasta el grado que uno que otro manifestaba molestia por ya saber la noticia y chutársela una y otra vez.
El humor mexicano con los memes corrió como pólvora poniendo incluso al Chepo como Chapo. Otros más originales manifestaron el sabadazo histórico con la caída del mexicano Hubertus Von Hohenlohe en los juegos de Sochi, la caída del hombre más buscado del mundo y la caída del WhatsApp.
Fotos de la detención de El Chapo salieron a la luz pública para dar credibilidad al asunto ¿Es realmente El Chapo? Se preguntaron algunos con el argumento de que podría ser otra persona cirugiada o con el cuestionamiento de ¿Por qué no cambió su cara en el quirófano con tanto dinero que tiene? Es cuestión de enfoques y de orgullo propio, pues el que tenga mucho dinero no es garantía de cambiar de cara, allí tiene el ejemplo de Carlos Slim, que con toda su lana no se hace más carita.
Lo cierto es que la detención de “El Chapo” representa un gran tanque de oxígeno para el presidente Kike Peña por conseguir lo que sus dos antecesores panistas Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa no pudieron o no quisieron hacer durante sus sexenios: capturar a Joaquín Archivaldo Guzmán Loera.
Pero ¿realmente lo capturaron autoridades mexicanas? Oficialmente sí, aunque las malas lenguas aseguran que fueron las autoridades estadounidenses las autoras, pues la noticia se dio a conocer en nuestro vecino país del norte antes de ser oficial en México, información que posteriormente las autoridades mexicanas sólo confirmaron. Así lo destacaron en la prensa internacional The Washington Post, Los Angeles Times y El Mundo.
Hace unos días escuchaba el mañanero de Brozo, en el que el payaso tenebroso cuestionaba los temas tratados en la Cumbre de Líderes de América del Norte, y en el que decía que aunque los mexicanos no sabíamos el contenido de fondo de la reunión y quizá nunca lo supiéramos, poco a poco en el trascurso de los días o semanas, íbamos a tener conocimiento con la creación de algunas leyes secundarias u otros temas que iban a ir aflorando poco a poco. ¡Y mire que ya supimos algo! ¡La caída de El Chapo! que estrenó la Nueva Ley de intercepción de celulares, recientemente aprobada. Porque déjeme decirle que en temas de política “las coincidencias no existen”.
Mucho nos hace pensar la forma “extraña” en que se detuvo al hombre más buscado del mundo, el enemigo público número uno, como se le considera en Chicago a “El Chapo”, mismo título que recibiría el padre de la mafia Al Capone allá por los años treinta.
Y es que es siendo un hombre que posee una riqueza de mil millones de dólares según la lista de Forbes en 2012, y teniendo la responsabilidad de la introducción de la cuarta parte de las drogas de México a Estados Unidos, no tuviera un comando armado con él o algún arsenal de armas que evitaran su inminente caída (¡A menos claro, que alguien haya dado información a cambio de los más de 96 millones de pesos que pedían por él autoridades de México y Estados Unidos)
Ya hacen sus apuestas para ver cuánto tiempo dura en la cárcel, para ver si no se vuelve a escapar “por la Puerta Grande”, sin embargo, esta vez será diferente, ya que Estados Unidos está solicitando su extradición para juzgarlo por 6 acusaciones pendientes en aquel país y seguramente será enviado para allá.
Políticamente hablando, la captura de “El Chapo” representa un gran acierto para el gobierno de Peña Nieto, tal vez sea el boom de todo su sexenio; asimismo, para el PRI, pues demuestra tener más fuerza de voluntad y contundencia que el PAN para hacer caer a un peso completo como es “El Chapo”.
Pero no olvide una cosa: Guzmán Loera representa mucho, pero muchísimo dinero, algo que no dejarán escapar el gobierno de Peña y, por supuesto, el de Estados Unidos, porque eso sí es Oxígeno a la Economía.

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