Pablo Jair Ortega/Columna sin nombre
FEUDOS EN VERACRUZ O NIDO DE MALANDROS
En México están suscitándose cosas sumamente delicadas que ponen en riesgo la estabilidad del país y la paz pública, situación que a todos debe preocuparnos porque de no frenarse, querámoslo o no, van a afectarnos a todos. Por eso la ciudadanía debe estar al pendiente de los acontecimientos, para tratar de entenderlos con meridiana claridad; atender los diferentes puntos de vista, las diversas interpretaciones que los actores hacen sobre un mismo problema, porque siempre existirán al menos dos puntos de vista distintos sobre un mismo fenómeno, dependiendo de los intereses políticos y económicos que estén detrás de tales opiniones. Afilar el pensamiento para penetrar en las entrañas de los sucesos y entender las verdaderas motivaciones, leyes y causas de los mismos.
Digo esto, porque el pasado domingo 9 de noviembre un sujeto de nombre Humberto Obeso, junto con otras 10 personas más pusieron una cadena en la calle Vulcano de la tercera sección del fraccionamiento Las Fuentes, Municipio de Xalapa, para “prohibir” el paso a los vecinos de la Col. Margarita Morán Véliz que transitan por ahí para llegar a sus casas. Estos sujetos arguyen que tomaron esta medida debido a que desde que se formó dicha colonia se han incrementado los robos y asaltos a casas habitación y que las calles de dicho fraccionamiento son propiedad privada. Como pudo observarse en las publicaciones de los diligentes medios informativos que dieron a conocer la noticia, Humberto Obeso y seguidores no presentaron ninguna prueba que demuestre que los vecinos de la colonia Margarita Morán sean los asaltantes, ni de que sean invasores, ni de que las calles sean de su propiedad, simplemente es su dicho y ya: se comportan como jueces inapelables, o, monarcas a los cuales hay que creerles y obedecerles como en los tiempos del feudalismo. Ante estos graves hechos totalmente fuera de la ley, considero importante decir lo siguiente:
Primero, que es falso que los vecinos de la colonia Margarita Morán Véliz sean los causantes de los asaltos y robos en esa zona de Xalapa; son gente humilde pero honrada y trabajadora, hasta que alguien demuestre lo contrario ante las instancias judiciales correspondientes; que es una colonia progresista, pues a escaso un año de haberse fundado tiene todas sus calles trazadas y engravadas, cuenta con drenaje, agua potable, jardín de niños, primaria, una capilla, se están construyendo las aulas para las escuelas, las guarniciones, una parte tiene alumbrado público y a inicios del próximo año se introduce la red de energía eléctrica. Son gente de bien que se ha organizado para tener una colonia digna, en la cual puedan vivir en paz.
Segundo, el señor Humberto Obeso está violando el derecho constitucional de libre tránsito de los vecinos no sólo de la colonia Margarita Morán, también están afectando a los vecinos de la Congregación Pacho Nuevo, es decir, a los pequeños propietarios del poblado Ojo de Agua y a los ejidatarios del ejido Estanzuela, así como a los habitantes de unas 14 colonias que pasan por la calle que mantienen bloqueada con la cadena y resguardada por sujetos alcoholizados y drogados, a quienes Humberto Obeso les paga para cumplir la función de “vigilantes”. La inmensa mayoría de los vecinos del fraccionamiento Las Fuentes no está de acuerdo con estas acciones fuera de la ley instrumentadas por este individuo. Todos los afectados han estado platicando sobre la necesidad de emprender una acción conjunta para quitar este “retén”; algunos plantearon el asunto ante el Ayuntamiento de Xalapa y en Palacio de Gobierno, pero hasta el momento no se ha visto una acción seria para reestablecer el estado de derecho. Todos los vecinos se preguntan quién o qué está detrás de Humberto Obeso. Hay versiones que en esa sección del fraccionamiento Las Fuentes viven malandros que se dedican a la delincuencia y que el establecimiento de la colonia Margarita Morán le estorba para llevar a cabo sus fechorías.
Sea que Humberto Obeso se quedó en un estadío de la humanidad que la historia ya superó, la época de los señores hacendados y sus feudos, o que con sus actos violentos e ilegales esté protegiendo a delincuentes, el Gobierno de Veracruz debe intervenir con energía, porque si no lo hace, los ciudadanos xalapeños pensarán que al dejar impunes las acciones de esta persona estaría haciéndose cómplice. Aquí parece estarse aplicando la máxima de los delincuentes, que para ocultarse y engañar a los demás, grita “al ladrón, al ladrón”, cuando en realidad, él mero es el ladrón. El Gobierno debe reestablecer el estado de derecho en la calle Vulcano, quitar de allí ese “retén”, antes de que la gente de la zona lo haga por su propia mano. Ojalá no tenga que llegarse a esto último.
Todo Xalapa y estado de Veracruz entero debe estar atento de cómo evolucione este problema, para que se castigue a los verdaderos culpables y no se hagan linchamientos mediáticos ni se conculque su derecho constitucional de libre tránsito establecido en el Artículo 11 de la Carta Magna, que a la letra dice: “Toda persona tiene derecho para entrar en la Republica, salir de ella, viajar por su territorio y mudar de residencia, sin necesidad de carta de seguridad, pasaporte…”, tal como se pretende hacer con los vecinos de la colonia Margarita Morán Véliz.