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CIUDAD DE MÉXICO, 29 de abril de 2016.- Poco más de la mitad (53.9%) de los 40 millones de personas de menos de 18 años de edad (un tercio de la población total del país) sufren situación de pobreza, revela un estudio del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En el estudio Pobreza y Derechos Sociales de Niñas, Niños y Adolescentes en México 2014 se concluye que a pesar de que existen avances importantes y sostenidos en el ejercicio de los derechos sociales de la población de 0 a 17 años y de que la pobreza extrema se redujo de 14.0% a 11.5% entre 2010 y 2014, no será posible observar reducciones significativas en los niveles de pobreza de esta población sin mejoras tangibles en el ingreso de los hogares en que viven.
Asimismo destaca la necesidad de que la inversión en la infancia sea suficiente, oportuna, eficaz, equitativa y pertinente para atender los desafíos de cada etapa del ciclo de vida. “La primera infancia es una etapa crítica para el desarrollo individual y social, y en México ésta recibe una menor proporción de recurso”, destacó Isabel Crowley, representante de Unicef en México.
Señaló que al organismo le preocupa que la incidencia de pobreza y pobreza extrema sigue siendo más alta entre los niños y niñas menores de 5 años, un periodo en el que las carencias dejan huella para el resto de sus vidas.
Unos de los principales hallazgos del estudio muestra que en 2014, 1 de cada 2 niñas, niños y adolescentes en México era pobre y 1 de cada 9 se encontraba en pobreza extrema, y que 53.9% de la población de 0 a 17 años en México (21.4 millones) carecía de las condiciones mínimas para garantizar el ejercicio de uno o más de sus derechos sociales.
Además, el ingreso de su hogar era insuficiente para satisfacer sus necesidades básicas, pues 11.5% de la población infantil y adolescente en el país (4.6 millones) se encontraba en pobreza extrema.
Se destaca que en 2014, 3 de cada 10 personas de 0 a 17 años en México, si bien no estaban en pobreza, eran vulnerables por carencias sociales o por ingreso, y que 20.6% de las personas de 0 a 17 años (8.2 millones) era vulnerable por carencias sociales.
En 2014, el derecho social en que la población infantil y adolescente presentaba mayor porcentaje de carencia era el acceso a la seguridad social, ya que 62.6% tenía esta carencia.
Asimismo, 27.6% presentaba carencia por acceso a la alimentación; 24.8% carencia por acceso a los servicios básicos en la vivienda; 16.7% carencia por calidad y espacios en la vivienda, 16.2% carencia por acceso a los servicios de salud, y 8% rezago educativo.
Otro hallazgo es que la reducción en las brechas existentes entre poblaciones consideradas tradicionalmente en desventaja y el resto de la población en algunas de las carencias sociales.
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