Ruperto Vázquez Ovando/Opinión en línea
A cuatro días de que termine el periodo de más de 200 alcaldes, la duda que me atormenta es saber a dónde van a parar estos cuasi desempleados.
Bueno, hay al menos varios casos que me intrigan, por ejemplo y el inmediato, es Sara Herrera Cano, quien asegura que volverá a dar clases a partir del siete de enero para reincorporarse a la secundaria Pesquera 20 de Alvarado… sinceramente lo dudo…
Otro caso que igual llena de interés, por la pretensión de publicitarse a lo largo y ancho del estado, es el de Fabiola Vázquez Saut, alcaldesa de Acayucan. Circula uno sobre la avenida Lázaro Cárdenas de la capital veracruzana, y antes de la intersección con la avenida Miguel Alemán, hacia Veracruz, se ve un espectacular de la hija del cacique… ¡vamos! es más imagen que mensaje… el asunto es conocer la intención de promocionarse de ese modo tan similar a como lo hace el gobernador… de Chiapas, el Güero Velasco. ¿Qué es lo que quiere?
Otro de los ediles que me llama la atención y no tanto porque esté haciendo bulla sino porque realmente no creo que terminada su administración en el Puerto, acabe su carrera política. Me refiero a Carolina Gudiño Corro, quien en estos momentos se encuentra embarazada y es posible que el 2014 sea un año sabático, en parte, porque al menos en el Congreso, mantiene presencia de su estirpe en manos (o dedo) de su hermano, actual diputado local.
La interrogante es si mantendrá su interés de participar en actividades políticas y si es así, ¿en dónde? Para nadie le es ajeno que Carolina Gudiño es parte esencial de los intereses o caprichos políticos del ex gobernador Fidel Herrera Beltrán, tan es así que encumbró su carrera (como la de muchos otros jóvenes) a pasos agigantados en menos de una década, por lo que si se tomara un año sabático, no debiera extrañarnos que Duarte de Ochoa le diera cobijo a Carolina, que en términos políticos, casi viene siendo su charolastra… ¡o hermana!
Por allí aparece igual Marcos Theurel Cotero, político gris que hasta era opacado por la gracia de su esposa Lupita. El edil de Coatza igual pertenece al redil de Fidel Herrera y no extrañe que igual tuviera cabida en los intereses de esta administración estatal.
Para mí, el último caso de interés: Elizabeth Morales.
Tanto sus malquerientes como bienquerientes anunciaron su arribo al Comité Directivo de los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2014, quizás en función de que cuando fue diputada federal estuvo en la Comisión de Juventud y Deporte… pero no llegó.
Elizabeth Morales ha sido cuestionada de manera increíble en las redes sociales, principalmente en facebook… se le critica desde sus zapatos, su cambio de look, preferencia sexual, ¡ah! y algunos igual señalan sus decisiones en la administración municipal.
Hay hasta quienes han conformado grupos que rechazan sus murales en distintos puntos de la ciudad… me invitaron a participar en él, pero como no soy artista ni pintor, y mi juicio en la mayoría de las artes se basa en un simple “me gusta” o “no me gusta”, lo rechacé.
Pareciera en algunos casos hasta un asunto personal y homofóbico; en otros, argumentan su rechazo a equis o ye obra, como la serpiente en el Parque Juárez que, curiosamente, para los turistas, no deja de ser admirable…
El asunto es que se quiera o no, Elizabeth Morales tiene un capital político respetable que no muchos gozan en esta capital…
Haciéndole al pitoniso, veo en Elizabeth Morales tres puertos:
1) Alguna dependencia donde haya actividad de tipo social, como el DIF o hasta Sedesol…
2) O volver a participar en su programa de “Usted no está solo”…
3) Pero yéndome a extremos más distantes que quizás muchos no participen y otros, quizás, ni lo imaginen, ¿por qué no ubicarla en el PRI estatal?
Sí, algunos pueden decir que para la secretaría general del PRI ya suena Corintia Cruz… el asunto es que yo no hablo de dicho cargo…
Lo dejo allí, lo dejo a consideración… es cuestión de analizar pros y contras… de dejar de ver al gobierno y sus ramificaciones como una agencia de colocaciones para hermanos (políticos) y trabajar en función de lo que pudiera beneficiar tanto al sistema como al partido…
Ahora que si no gusta mi perspectiva, adelanten una hoja a su calendario, y tómenlo para sí, como si fuera el Día de los Inocentes…
Que sea el tiempo el que hable… y el cerebro o el corazón del Gobernador.