Libertad de expresión con periodistas asesinados y desaparecidos

XALAPA, Ver., 7 de junio de 2014.- En lo que va de la administración del gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, diez reporteros han sido asesinados y cuatro están en calidad de desaparecidos.

La situación ha llegado a tal grado que se ha calificado a Veracruz como uno de los estados más peligrosos para ejercer el periodismo, de acuerdo a organizaciones periodísticas como Artículo 19 y Periodistas de a Pie.

Ante esta situación, una veintena de comunicadores abandonaron su trabajo en el estado y viajaron en busca de otras oportunidades laborales. De todos ellos sólo uno no volvió pues fue arropado por organizaciones de periodistas en Europa.

El reportero Noel López Olguín desapareció el 8 de mayo. Laboraba en los semanarios Noticias de Acayucan y Horizonte. Ya había recibido amenazas de parte de algunos presuntos políticos. Un hombre que fue detenido por la policía el 27 de junio de 2011, confesó haber colaborado en el asesinato de López Olguín, cuyo cuerpo fue hallado en una fosa clandestina en el municipio de Chinameca.

La madrugada del 20 de junio de 2011, fueron asesinados el subdirector del periódico Notiver, Miguel Ángel López Velasco (a) “Milo Vela”, junto con su esposa y su hijo. Un grupo armado ingresó al hogar del periodista y perpetró el ataque.

La reportera de nota roja en el periódico Notiver, Yolanda Ordaz de la Cruz, fue secuestrada por un grupo armado el 24 de julio de 2011. Madre de dos niñas, la mujer fue encontrada muerta y su cabeza colocada a unos pasos de un diario veracruzano. El ex procurador de Justicia, Reynaldo Gaudencio Escobar Pérez, trató de relacionar su muerte con actividades de narcotráfico. Directivos de Notiver exigieron la renuncia del funcionario y poco después, fue destituido.

El 28 de abril de 2012, la corresponsal de Proceso Regina Martínez fue encontrada muerta en su hogar. Fue golpeada y asfixiada. Tras su asesinato se procesó a un indigente apodado “El Silva”, quien fue condenado por un juez. Sin embargo, un magistrado del Poder Judicial de Veracruz revirtió la condena y el supuesto asesino quedó en libertad. La reportera había publicado diversos artículos en donde evidenciaba presuntos actos de corrupción y distintas anomalías del Gobierno de Veracruz.

Unos días después, el 3 de mayo de 2012, aparecieron los cuerpos de los reporteros gráficos Gabriel Huge, Esteban Rodríguez, Guillermo Luna Valera y la pareja de éste, Irasema  Becerra. Fueron torturados y tras ser asesinados, sus cuerpos fueron cercenados.

Tras salir de la oficina del portal Reporteros Policíacos, el reportero Víctor Manuel Báez Chino fue privado de su libertad por un grupo armado. Era editor de la sección policíaca del periódico Milenio El Portal. Su cuerpo apareció a unos 200 metros de Palacio de Gobierno y su cabeza estaba a un lado.

En tanto, uno de los periodistas que se mantienen desaparecidos es Jesús Mejía Lechuga, desde julio de 2003 y que laboraba en MS-Radio en Martínez de la Torre.

En abril de 2010 desapareció el director del semanario Espacio. Fue precandidato a la alcaldía de Colipa. Después de salir de las instalaciones del Comité Directivo Estatal del PAN fue secuestrado y hasta el momento se desconoce su paradero.

En septiembre de 2011, el corresponsal del diario El Mañana, Gabriel Fonseca desapareció. Ya había recibido supuestas amenazas por su actividad periodística; cubría la nota roja. Su familia jamás recibió llamada en donde se solicitara algún rescate.

Tras haber recibido amenazas unas semanas antes, el reportero de nota roja, Sergio Landa, del Diario de Cardel, se despidió de sus compañeros el domingo 20 de enero de 2013. Ya había sido  secuestrado  antes por un grupo armado. A la fecha se ignora su paradero.

Uno de los casos que llamó la atención, incluso en el ámbito internacional, fue el secuestro y asesinato del reportero Gregorio Jiménez. El comunicador fue plagiado a las afueras de su domicilio, en Coatzacoalcos. El 5 de febrero del presente año, el cuerpo de “Goyo” Jiménez fue encontrado en una fosa clandestina en Las Choapas, junto con el de otras dos personas.