Matan al sacerdote Marcelo Pérez en San Cristóbal de las Casas, Chiapas
XALAPA, Ver., 9 de agosto de 2015.- La fe es un regalo de dios, y quien crea en ello vivirá para siempre, indicó el arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios durante la homilía dominical, donde explicó que creer en el Todopoderoso a través de Jesús repercute a favor en la vida de las mujeres y hombres.
En ese sentido, reiteró que el alimento material es necesario, pero se requiere también del alimento de la fe para existir, y citó uno de los pasajes bíblicos que dice: “Jesús es el pan de la vida, el que vivirá eternamente”.
“Y eso es a lo que invitamos a la feligresía; por eso es indispensable comulgar, porque es el cuerpo y sangre de Cristo. No sólo se trata de venir a la misa, de estar presente en el sermón, sino alimentarnos con la palabra de dios y alimentarnos con el cuerpo y la sangre de nuestro señor Jesucristo”. El prelado refirió que un creyente “auténtico y verdadero” necesita de la fe, de lo contrario será un ser endeble.
“San Rafael Guízar lo decía de una manera muy sencillita, cuando alguien le preguntaba ¿Quién es Jesucristo?, respondía es dios, hijo hecho hombre, ante esta realidad uno puede tomar dos actitudes fundamentales: la primera, o se cree que Jesucristo es verdaderamente el hijo de dios, que es el mesías esperado y que nació de la virgen María por obra del espíritu santo y se hizo hombre o no se cree; y ha habido mucha gente que simplemente no lo cree”.
Sin embargo, insistió que la manifestación de Jesús como hijo de dios es un mandato celestial, “y para creer en Jesús antes deben ser atraídos por el Padre, él tiene que otorgar la gracia, por eso la fe es una actitud maravillosa, porque es confiar plenamente en dios, en su palabra y en obras. Eso es la fe”.
Lo contrario a la fe, explicó Hipólito Reyes Larios, es la incredulidad, la cual empieza por la murmuración y se lamentó por quienes viven de tal forma.