
Presenta Leonardo Amador plan Renace Poza Rica
XALAPA, Ver., 25 de agosto de 2015.- Con el fin de atender y garantizar la seguridad de mujeres y niños en los espacios de transporte público, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), en coordinación con la Dirección General de Tránsito y Seguridad Vial del Estado (DGTSVE), implementará el programa integral “Mujer segura, por un transporte libre de violencia”.
El esquema consiste en destinar lugares preferenciales para mujeres, niñas y niños dentro de las unidades de transporte público de la entidad, a fin de erradicar el acoso sexual que se presente en su interior, el cual es considerado delito.
De acuerdo con la Dirección de Tránsito, la estrategia inicia porque 75 por ciento de los viajes en autobús los realizan mujeres; 60 por ciento de ellas han sido víctima de algún tipo de violencia de género y siete de cada 10 mujeres afirman tener miedo de usar este medio.
Por ello, en el objetivo de prevenir y atender el acoso y hostigamiento sexual a ese sector poblacional, así como promover que éste sea eficiente, seguro, humano y competitivo, “Mujer segura” se iniciará en la capital del estado, para posteriormente ser presentado en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, Córdoba, Orizaba, Coatzacoalcos, Tuxpan y Poza Rica.
Para realizar este programa fue solicitada la participación de organizaciones civiles, como el Instituto Municipal de las Mujeres (IMM), el Colectivo Feminista de Xalapa y Hombres Renunciando a su violencia AC, a fin de atender sus respectivas demandas; de igual forma, aportaron información sustantiva para poder encaminarlo.
Ante esto, existen los números gratuitos (01800) 849 75 60 para denunciar si eres víctima de violencia o acoso en el servicio urbano; 066 y 089, y la Línea de la Mujer, 075.
De acuerdo con el artículo 190 del Código Penal del Estado de Veracruz, este delito es perseguido si es denunciado. Las sanciones van desde seis meses a tres años en prisión y multa de 300 días de salario.
El acoso en el transporte público se presenta cuando la mujer sufre miradas, palabras ofensivas, insinuaciones o expresiones corporales con fines sexuales.