Raymundo Jiménez/Al pie de la letra
La reducción de plurinominales
El pasado 20 de agosto, el Partido Revolucionario Institucional planteó la intención de realizar una consulta popular sobre el tema de las diputaciones plurinominales, a fin de que los mexicanos opinen si es necesario reducir el número de diputados electos por esa vía, de 200 a 100 legisladores.
El documento que publicó el Comité Ejecutivo Nacional de dicho partido señala como potenciales beneficios de esa medida la reducción del gasto público que representa el Congreso, la facilidad para la construcción de acuerdos entre las diferentes fuerzas políticas, la garantía de un mayor espacio para la construcción de mayorías parlamentarias, y la toma oportuna de decisiones, entre otros.
De acuerdo con el texto presentado por el dirigente de ese partido, César Camacho, la única pregunta que se plantearía a los ciudadanos sería: “¿estás de acuerdo en que se modifique la Constitución para que se eliminen 100 de las 200 diputaciones federales plurinominales y las 32 senadurías plurinominales?”
La respuesta es predecible, dado el descrédito que tiene el poder legislativo en este país y particularmente los diputados por representación proporcional. No hay encuesta sobre percepción social que no envíe al sótano a los responsables de hacer las leyes que rigen a los mexicanos.
Sin embargo, no es un debate reciente: durante el sexenio pasado, el presidente Felipe Calderón también turnó al Congreso una iniciativa para reducir de 500 a 400 el número de diputados, aunque esa propuesta modificaba también la cantidad de distritos y, por consiguiente, de legisladores electos por el principio de mayoría relativa, que pasarían de 300 a 240; los plurinominales, de 200 a 160. Los partidos de la Revolución Democrática, del Trabajo y Convergencia por la Democracia se opusieron a dicha posibilidad.
Ya en la pasada campaña de 2012, el tema fue retomado por el entonces candidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto.
Dos años después, el partido en el poder anuncia su consulta pública sobre dicho tema, pero no abre la posibilidad de eliminar la figura de los diputados por representación proporcional, sino sólo reducirla a la mitad.
Por otra parte, habría que destacar que en el actual Congreso de la Unión, los plurinominales mantienen la hegemonía: en la Cámara Baja tienen el 66 por ciento de las posiciones en la Mesa Directiva; el 87 por ciento de la Junta de Coordinación Política; y presiden 40 de las 56 comisiones. En el Senado de la República, 3 de los 9 miembros de la Mesa Directiva son plurinominales; al igual que 3 de los 5 integrantes de la Junta de Coordinación Política; y presiden 14 de las 54 comisiones. Por si fuera poco, en tribuna son los más participativos porque generalmente cuentan con más experiencia parlamentaria que los electos con el voto directo de los ciudadanos, que, salvo raras excepciones, llegan ignorantes de los procesos legislativos.
Actualmente, de los 200 diputados federales plurinominales, 62 son de Acción Nacional; 49 del Revolucionario Institucional; 42 del Partido de la Revolución Democrática; 15 del Verde; 12 del Movimiento Ciudadano; 10 del Partido del Trabajo; e igual número de Nueva Alianza. La inevitable pregunta que salta es ¿a qué partidos beneficiaría la reducción y a cuáles perjudicaría?
Habrá que ver también si esa medida se extiende a las legislaturas estatales y, en todo caso, cuáles serían los cambios en Veracruz y cómo quedarán conformados los próximos congresos locales. @luisromero85