Hora Cero

Durante la madrugada del miércoles 4 de diciembre, las comisiones unidas de Gobernación, Puntos Constitucionales, Estudios Legislativos y Reforma del Estado, del Senado de la República, aprobaron la reforma política que si bien no incluía la segunda vuelta en las elecciones presidenciales, como lo proponía el Partido Acción Nacional, si representa cambios sustanciales: la reelección de diputados federales, senadores, legisladores locales y alcaldes; y la creación de una Fiscalía General y también del Instituto Nacional Electoral, que sustituirá al actual Instituto Federal Electoral.
Los legisladores aprobaron también un castigo más drástico a quienes violen los límites máximos de gastos de campaña, al partido y candidato que use recursos de procedencia ilícita, y a quien desvíe recursos públicos para campañas políticas.
No sólo eso; la propuesta de reforma política aumenta del 2 al 3 por ciento de la votación el requisito para que un partido logre o mantenga su registro, lo que constituyó un golpe para los partidos bonsái.
La reforma política fue aprobada, decíamos, a principios de diciembre del año pasado por el Senado de la República y ratificada por la mayoría de los congresos estatales; sin embargo, no ha sido promulgada por el presidente de la República y por tanto, aún no entra en vigor.
En los términos de esas modificaciones legales se incluye la homologación de las elecciones en todo el país, lo que obligaría a las legislaturas de los estados a adaptar sus leyes y los tiempos electorales a las reformas aprobadas por el Congreso de la Unión.
En Veracruz, este martes 28 de enero, la bancada panista en la Legislatura del Estado presentó una iniciativa para modificar la Constitución Política de Veracruz, con la finalidad de ir acorde con la reforma política aprobada en el Senado de la República. El documento establece la reelección hasta por cuatro periodos consecutivos de los diputados locales, siempre y cuando sean postulados por el mismo partido, salvo en casos en que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad del mandato.
De acuerdo con esa propuesta, los ediles podrían ser elegidos hasta por dos periodos consecutivos, de tal manera que los legisladores podrán permanecer en el cargo durante 12 años, mientras que alcaldes, síndicos y regidores, únicamente por 6.
Sin embargo, la discusión que se avecina sobre ese tema no se limita a la reelección de ediles y legisladores, sino que incluye también los tiempos electorales y los periodos gubernamentales. En ese sentido, destaca el hecho de que los diputados que integren la LXVI Legislatura del Estado se mantendrán en el cargo solo por dos años, mientras que los ediles que sean electos en 2017 –esto es, en el siguiente proceso– ocuparán sus cargos por un periodo de nueves meses.
El punto más relevante en esa discusión será el periodo de gobernador del estado, ya que de homologarse los procesos electorales locales con las elecciones federales a partir de 2018, el próximo ejecutivo veracruzano sólo estaría en el cargo durante dos años. Son temas que están pendientes en el debate legislativo de la entidad. @luisromero85