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POZA RICA, Ver., 21 de marzo de 2014.- Familiares del menor de edad que en vida llevó el nombre de Mario Abraham Sánchez Reyes, se manifestaron a las afueras de la Unidad Médica 24 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de esta ciudad, para exigir justicia ante el presunto caso de negligencia médica que derivó en el deceso del menor.
Visiblemente molestos, los manifestantes demandan se haga justicia por este hecho, al tiempo de señaalr que los médicos Mario Blázquez y Alfredo Valencia como los presuntos responsables del deceso.
Los manifestantes arremetieron contra las instalaciones del área de urgencias de la institución y aunque personal de seguridad buscó impedirlo, resultaron insuficientes ante la turba de personas que se abalanzaron sobre las puertas de la unidad médica y lograron ingresar en medio de gritos y severas consignas en contra del personal médico.
Los manifestantes lanzaron una serie de improperios al personal médico, a quienes demandaron que dieran la cara, con el grito de “justicia, justicia, justicia”, en tanto que los actos generados por las personas indignadas generaron preocupación entre los presentes en el área de urgencias que prefirieron salir de las instalaciones.
Cabe recordar que el pasado 15 de este mes, el menor Mario Abraham Sánchez Reyes fue ingresado a la institución médica a consecuencia de una neumonía.
“Lo tuvieron cinco días, hasta el día miércoles que convulsionó, lo atendieron, pero convulsionó porque el médico le puso medicamento; en la tarde le puso uno tras otros, hasta que sus pulmones reventaron”, explica Silvia Moreno Pérez, abuela del infante, quien señaló que el niño a las 19:00 horas del mismo miércoles aún respiraba, y aún en ése momento no hicieron nada por salvarle la vida.
El menor fue aislado en el área de urgencias y no en el cama en la que había sido confinado para ser atendido y en la que permaneció desde el sábado, “no hacen nada; usted entra a urgencias y están tragando y los enfermos allá”, recriminó visiblemente indignada la familiar del menor.
El abogado Austreberto Santana confirmó que ya se interpuso una denuncia de carácter penal en contra del personal médico a consecuencia de la negligencia que llevó a la pérdida de vida del infante, al tiempo de denunciar que en todo momento -según versiones- el personal de la institución buscó evadir desde el fallecimiento del menor la acción de la justicia, pues dieron una versión distinta a la ocurrido al personal del Ministerio Público.
Entre la información brindada al Ministerio Público destaca en primera instancia el hecho de haber cambiado el sexo del menor, “dijeron que era niña, posteriormente dijeron que había nacido mediante cesarea y que por ello había nacido con defecto en sus riñones, que tenía 10 días internado, y no, cuando apenas tenía 5”, agregó otro de los familiares indignados.
“No le habían puesto nada de medicamento, el día que comenzó a convulsionar, le metieron suero y penicilina; el forense determinó que sus pulmoncitos estaban muy hinchados”, y por lo cual hoy se sigue una investigación por muerte violenta.
El menor falleció a las 21:00 horas del pasado miércoles 19 de marzo. Los padres Aracely Sánchez Gayosso y Mario Abraham Sánchez Moreno sepultaron al menor en el Panteón San Lucas, de esta ciudad, la tarde de este viernes.