Tatahuicapan, siempre dispuesto al diálogo: alcalde
VERACRUZ, Ver., 17 de julio de 2015.- Los dirigentes de las principales cámaras empresariales en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río rechazaron la aprobación de la nueva Ley de juventud segura y libre de alcohol, y advirtieron que, si la nueva reglamentación procede en la zona metropolitana, la más poblada del estado, buscarían ampararse contra ella.
El presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en Veracruz, Belgio Amaya Rizo, aseguró que las nuevas medidas adoptadas por el gobierno del estado, y que podrían emular los ayuntamientos, les causarían serias pérdidas en las regiones consideradas como turísticas.
El líder de los comerciales establecidos estuvo acompañado del presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), Guillermo Bouchez Gómez, y el presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles, Fernando Ortiz.
También asistieron José Burela Picasso, presidente estatal de Canirac, y algunos integrantes estatales del sector empresarial que, de igual manera, se pronunciaron en contra de las nuevas determinaciones.
“Está provocando, por parte de Canaco, afectaciones en este sentido de desarrollo económico y de apertura de nuevos negocios, esto basado en el decreto que se emite el 30 de julio, en donde nos dice que esta reforma se adiciona a la Ley de Salud y a la Ley del Código Penal, asuntos claros y específicos como es la venta de alcohol; en cualquier lugar, se debe cerrar hasta las 2:00 de la mañana”, dijo Amaya Rizo.
Además, consideró que otra de las propuestas de dicha ley que les afecta es que no puede haber venta de alcohol a menos de 300 metros de una escuela, lo que dañaría los comercios, como Oxxo.
“Esto está obstaculizando la apertura de nuevos negocios, estamos hablando de las tiendas de conveniencia que están cerca de una escuela, porque manejan lo que conocemos como lunch. Hay veces que antes de llegar a una escuela se compra un yogurt, se compra unas galletas, se compra algo para los niños y, a la salida, muchos jóvenes pasan por un sándwich, un hot dog o un refresco”.