Marko Cortés evidenció que posiciones del PAN se las reparte la cúpula
SAO PAULO, Bra., 4 de marzo 2016.- Para ser interrogado en la última fase de la investigación por presunta corrupción en la empresa Petrobras, el expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, fue detenido.
Reforma detalla que el expresidente fue involucrado en el caso por supuestas evidencias de que se benefició de un esquema de soborno de la petrolera paraestatal Petróleo Brasileiro SA.
La macrooperación Aletheia (búsqueda de la verdad) comenzó cerca de las 6:00 horas locales, y participaron unos 200 policías y 30 auditores de Hacienda, cumpliendo órdenes judiciales en los estados de São Paulo, Río de Janeiro y Bahia.
Al domicilio de Lula, en São Bernardo (a unos 20 kilómetros de São Paulo) no tardaron en acercarse simpatizantes y detractores del político; su hijo, Fábio Luiz da Silva, conocido como Lulinha, también recibió la visita de agentes de la Policía Federal en su apartamento en el barrio de Moema, zona sur de São Paulo.
La operación se enmarca en las investigaciones de corrupción en Petrobras y fue ordenada por el juez federal Sergio Moro, quien está a cargo de las averiguaciones sobre una red que se apropió ilegalmente de unos 2 mil millones de dólares de las arcas de la petrolera.
La Policía federal dijo que se lanzó una operación anticorrupción con 33 órdenes de allanamiento y 11 de detención en distintas ciudades, entre la que se incluyen dos en Sao Bernardo do Campo, el lugar de origen de Lula da Silva.
Se trata del golpe más duro hasta el momento contra el ex Mandatario, sobre el que pesaban sospechas desde hace tiempo; los investigadores apuntan a las remodelaciones de dos viviendas que frecuentaba Lula, pagadas por las constructoras Odebrecht y OAS, como una vía por la que el político recibió beneficios ilícitos.