Desde el Café

Cada vez que se suelta una epidemia de lo que sea, las autoridades de Salud toman medidas como vacunar a la población, monitorear los avances o retrocesos de la enfermedad y dan a conocer el número de personas afectadas y de víctimas. Esto sucede en todas las jurisdicciones sanitarias. Bueno, no en todas. En la Jurisdicción Sanitaria Número 2 con sede en Tuxpan, se oculta información. 

¿A qué se debe?
Sabrá Dios.
El chiste es que cuando se le pregunta a la titular Auda Priego sobre el tema, invariablemente contesta con evasivas o niega que existan enfermos por epidemias.
Esto no deja de ser curioso porque su Jurisdicción abarca los municipios de Tantima, Chinampa, Tancoco, Cerro Azul, Tamalín, Naranjos, Temapache, Tamiahua, Tepetzintla, Ixcatepec, Chontla, Citlaltepec y el mismo Tuxpan. Estamos hablando de trece municipios y de un millón de habitantes en números redondos.
¿Qué fórmula emplea Auda para mantener libre de epidemias a los habitantes de aquella zona? ¿Cuál es el secreto de su cerco sanitario?
Ni existe fórmula ni hay secreto. Simplemente negación.
El año anterior negó que hubiera casos de dengue y menos de dengue hemorrágico, pero la entonces directora del ISSSTE, Maridol Salas, la desmintió al declarar que en ese nosocomio había ocho casos y tres eran de dengue hemorrágico.
Atrapada en la mentira Auda cerró las puertas a los reporteros y dejó de emitir declaraciones un buen tiempo. Después volvió a las andadas. Ahora niega los casos de influenza.
La Influenza es una epidemia que llegó para quedarse y aunque no ha ocasionado las afectaciones que en 2009 cuando entró por primera vez a nuestro país, la Secretaría de Salud contabilizó del 1 de enero al 5 de marzo, 6 mil 166 casos en el territorio nacional , de los cuales, 4 mil 950 fueron por A(H1N1). 562 por A(H3N2). 164 por B y 490 debido a otros tipos.
Por su parte la Dirección General de Epidemiología informó que se habían registrado 660 defunciones en ese periodo.
Un día después, el 6 de marzo, se tenían contabilizados 6 mil 242 casos y 669 muertes.
¿Ninguno de ellos pertenece a la Jurisdicción Sanitaria Número 2?
Si es así, habrá que felicitar a la doctora Priego por su excelente labor.
Que en los trece municipios haya bandera blanca, es para hacerle un reconocimiento público. De hecho es para que la misma Auda lo ande presumiendo.
Solo tres preguntas, y va la primera.
Hace unas semanas murieron una menor y una joven en el hospital Emilio Alcázar de aquella ciudad. De acuerdo con los familiares, ambas fallecieron por influenza A(H1N1).
¿Es cierto esto?
Segunda pregunta: el director del mencionado hospital, Joaquín Hernández Castillo, tiene varios días sin presentarse a laborar y se comenta que tiene influenza. Al menos así se lo dijeron a este columnista personas cercanas al médico pediatra que pidieron el anonimato por razones fáciles de entender.
El problema es que al parecer la doctora Priego «ignora» la enfermedad que aqueja al médico.
De ser así, el asunto es muy grave.
Que no sepa el mal que padece un trabajador intendencia del centro médico de Tantima, vaya y pase. Pero que ignore de qué está enfermo el director de un nosocomio cuya oficina está casi pegada a la suya, habla de la apatía y dejadez con que la doctora Priego se maneja en su trabajo.
Ahora que si está ocultando información, esto es más grave aún.
Es necesario que las autoridades de Salud en Tuxpan principiando por la doctora Auda Priego, manejen con la seriedad del caso este tipo de pesquisas, porque no es con la negación como se abatirán epidemias como la influenza.
Así como ocultan información a la ciudadanía, ¿también la han ocultado al Secretario de Salud, Juan Antonio Nemi Dib? Esta sería la tercera pregunta.

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