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VERACRUZ, Ver., 26 de junio de 2015.- Una vez que quede constituida la nueva empresa mixta del Sistema de Agua y Saneamiento Metropolitano (SAS), se analizará el futuro de los trabajadores sindicalizados, quienes tienen hasta el 31 de agosto para concluir todo lo que tiene que ver con el contrato y el proceso de entrega-recepción, informó el director del organismo, José Tello Allende.
“De los compromisos que no se han podido cumplir, estamos hablando de un convenio que se dio en el mes de enero, que son aproximadamente como 20 millones de pesos, 11 millones que se debieron haber pagado de un total de 23 del día 30 de abril, que nada más se pagó la mitad, y para el día 7 de julio, un total de 7 millones”.
Tello Allende recordó que la deuda inmediata y total del SAS con dependencias, proveedores y sindicato es de 260 millones de pesos, pero no se descarta que la cifra sea mayor, tomando en cuenta que hacen pagos graduales y que los intereses la van incrementando.
“Lo principal es el recurso, porque recuerden ustedes que los problemas que se tienen principalmente en el SAS, es la cuestión financiera, la liquidez. La liquidez es la parte donde la legislatura considera la oportunidad de que alguien traiga dinero fresco y poder ayudar a resolver los problemas para garantizar un mejor servicio, un servicio de excelencia a la ciudadanía”.
El funcionario insistió en que tienen hasta el 31 de agosto para concluir todo lo que tiene que ver con el contrato y el proceso de entrega-recepción; de no quedar listo, están en la posibilidad de solicitar una prórroga al Órgano de Gobierno del SAS.
“Hasta el momento tampoco se ha cumplido a cabalidad con el convenio firmado con el sindicato, a quienes se le adeudan 17 millones de pesos por diversas prestaciones”.
El director de SAS reconoció que mantienen otro pasivo con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) por el orden de 8 millones de pesos, correspondiente a la facturación de mayo y parte de junio.
“Eso es algo que desde que iniciamos lo hemos venido resolviendo y hoy no va a ser la excepción, sumando la parte de la segunda facturación de mayo y la primera facturación de junio deben de ser sobre seis millones de pesos y lo que está por llegar debe de ser aproximadamente como un millón y medio de pesos que se tendrá que pagar”.