Raúl López Gómez/Cosmovisión
DE NUEVO INCUMPLE EL GOBIERNO DEL ESTADO
El pasado martes 21 de octubre, el Comité Estatal Antorchista, sostuvo una reunión con el Gobernador del Estado y con una parte de su Gabinete para de nueva cuenta tomar acuerdos en torno a las demandas de obras y servicios planteados por los pueblos y colonias antorchistas. Lo novedoso de dicha reunión consistió en que se convocó a los empresarios constructores, encargados de las obras que tienen que ver con espacios educativos y obras públicas como caminos, puentes, pavimentos, etc.
Dicha reunión tuvo una duración de 4 horas y media, ya que se fue revisando obra por obra, se fue diciendo la cantidad que la Secretaría de Finanzas depositaría a cada una de ellas y se establecieron las fechas de reinicio de las mismas, pues en su mayoría se trata de obras iniciadas. Pues bien, ya pasaron las fechas acordadas y la inmensa mayoría de los acuerdos que allí se tomaron no se cumplieron. Situación que, como era de esperarse, ha incrementado la irritación de la gente, que nuevamente se siente burlada por parte de las máximas autoridades del estado. Los padres de familia que ven a sus niños tomar clases en casas prestadas, o en aulas de cartón, de madera o de zinc, o que en un mismo salón están hacinados infantes de diferentes grados académicos, tienen que molestarse con la Institución que por ley tiene la obligación de construir las escuelas. Los campesinos que no pueden transitar los caminos por encontrarse destruidos, o en muy malas condiciones, se sienten decepcionados de las mentiras de los funcionarios y, también, están molestos.
Como ya lo he dicho en ocasiones anteriores, las peticiones de los antorchistas, tienen que ver con obras elementales, como son aulas escolares que benefician a miles de niños, que nada tiene que ver con intereses de grupo; de caminos y carreteras por los que transitarán todos los ciudadanos, no importando el partido al que pertenezcan, electrificaciones, aguas potables, lotes para vivienda, etc. Se trata de obras que se justifican desde el ángulo que se les quiera ver, de obras que mejoran las condiciones de vida de miles de familia e impulsan el desarrollo de zonas enteras; se trata de obras que atacan la pobreza de nuestro estado y contribuyen en mucho a la paz social. Sin embargo, los funcionarios estatales parecen estar jugando a que te digo que sí, pero no te cumplo.
Sólo a título de ejemplo, citaré algunos casos: en la Reserva Territorial de Vergara Tarimoya IV en el Puerto de Veracruz no se puede construir un Jardín de Niños y una Telesecundaria, debido a que se requiere nivelar el terreno: el Ing. Gerardo Buganza Salmerón, dijo frente al gobernador, “el lunes 27 de octubre inician los trabajos de nivelación” y nos dio el nombre de la constructora, pasó esa fecha y ésta no se presentó, poniéndose en riesgo perder los recursos para construir algunas aulas, que fueron asignados a dichas escuelas por la SEP en el programa de escuelas de excelencia. En el municipio de Citlaltépetl se presentó la empresa con maquinaria para construir 2 aulas de un bachillerato y, junto con el presidente municipal, dieron el banderazo de arranque, pero dos días después la empresa se retiró del municipio alegando falta de pago. En otros casos, se hicieron depósitos a constructoras, pero a la hora de la hora, resultó que dicho dinero estaba destinado para obras distintas a las que ahí se estuvieron discutiendo. Una verdadera burla para los interesados.
La situación política del país se enrarece cada día más y crece la inconformidad de los ciudadanos, pero los verdaderos culpables son este tipo de funcionarios incongruentes, que prometen una cosa y hacen lo contrario. El Gobernador del Estado, Doctor Javier Duarte de Ochoa, tiene que revisar qué está pasando con su gobierno, pues es su responsabilidad garantizar que se cumpla con lo estipulado en la Constitución General de la República, que fue pensada para cumplir con las dos funciones básicas de toda Constitución: garantizar la unidad nacional y permitir y promover el desarrollo y progreso de la sociedad en su conjunto, y no sólo el de los grupos privilegiados; tiene que revisar si se está cumpliendo con lo planteado en el Plan Veracruzano de Desarrollo, en el sentido de combatir la pobreza. De no hacerlo, los ánimos de la población se irán crispando a paso acelerado. De parte del Movimiento Antorchista Veracruzano y Nacional, le pedimos se cumpla lo acordado en la reunión del pasado 21 de octubre en Casa Veracruz.
Los datos de la pobreza en Veracruz son graves y los gobiernos de los tres niveles deben combatirlos antes de una crisis política mayor: de acuerdo al CONEVAL, Veracruz es el quinto estado con peor índice de carencia por acceso a los servicios de salud a nivel nacional, el 36.9% de la población carece de éstos; el 69.9% de los veracruzanos carecen de acceso a la seguridad social, es el noveno estado que más presenta este rezago; el 24.5% de la población tiene problemas relacionados con la vivienda, es el cuarto peor ubicado; el 29.5% carece de servicios básicos en la vivienda; el 26.5% tiene carencias por acceso a la alimentación; el 62.6% de la población tiene ingresos inferiores a la línea de bienestar y el 58.3% de la población vive en condición de pobreza (4,454,800 personas), el segundo lugar en números absolutos y el séptimo en términos porcentuales a nivel nacional. Es el segundo estado que presenta mayor desigualdad en cuanto a las condiciones de vida de su población. Por tanto, el gobierno del estado hará bien en estudiar las recomendaciones de organismos internacionales como la OCDE y la confederación Oxfam internacional, organismos a los que México está asociado, y que recomiendan se ataque este grave problema de la pobreza en Veracruz.