Elegirán en Veracruz 35 magistrados y jueces de distrito el 1 de junio
OKLAHOMA, E.U., 11 de junio de 2014.- Un médico de Oklahoma, ante los múltiples tiroteos que se han registrado últimamente en escuelas estadounidenses, inventó un método de defensa en caso de que alguien abra fuego en un salón de clase: una manta antibalas.
Similar a una alfombra de yoga, la manta permite que los niños se protegan ante algún ataque armado e incluso ante tornados, de acuerdo a su creador Steve Walker, de 43 años.
Junto con sus dos hijos, creó este escudo de color naranja, dijo, al sentirse frustrado a raíz del tiroteo en el que murieron 20 niños en la escuela de Sandy Hook en diciembre de 2012, así como por un tornado que arrasó escuelas de Oklahoma en mayo de 2013.
Walker contó que él y sus socios quisieron ir un paso adelante del estancamiento político y «desarrollar algo en el que ambas partes pudieran estar de acuerdo», por lo que surgió la idea de brindar esta medida de protección a los estudiantes.
Los creadores señalaron que la «manta guardaespaldas» («Bodyguard Blanket)», que cuesta unos 1.000 dólares está hecha con los mismos materiales a prueba de balas que los que usa el ejército estadounidense, y que protege contra el 90% de las armas que han sido usadas en tiroteos en escuelas estadounidenses.
«No estamos diciendo de ninguna manera que esto impedirá que los niños sean heridos. Sólo se reducen las posibilidades», aclaró Walker.
Con información de MVS