Columna Sin Nombre

En la Ciudad de México inicia este viernes el que sería el Hay Festival de Xalapa, y está programado hasta el domingo.

La sede es ahora la Ciudad de México, luego de que un grupo de “intelectuales” y “connotados” pugnaron para que el festival dejara de hacerse en Xalapa, según para castigar al gobernador Javier Duarte de Ochoa por ser un represor contra la libertad de expresión y por ser el “asesino” número uno de periodistas.

Y así con firmas y peticiones (y sin que nadie le consultara a los académicos o artistas locales), los organizadores decidieron retirar como anfitriona a una de las más importantes capitales culturales en la historia de México.

Según su web oficial: “Esta edición irá acompañada de contenido on-line coproducido por Hay Festival y BBC Mundo a partir del 19 de octubre en Hay Festival @BBCMundo”.

La pregunta sería ahora si algo ayudó o cambió con el reemplazo del lugar. Si creen que el Gobierno de Veracruz o Javier Duarte están sufriendo colmadamente, arrebatados en llanto y tristeza, porque la sede dejó de estar en la capital veracruzana.

Los que promovieron la salida del Hay Festival deben estar en estos momentos sintiéndose como héroes y paladines de la libertad de expresión, por haber desaparecido uno de los pocos foros internacionales que le daban voz a Xalapa y a una comunidad cultural que nunca calla (ni debe callar) en su protesta.