Raúl López Gómez/Cosmovisión
Los «espaldarazos» para el próximo Gobernador
En la dinámica de la política, cuando un personaje relevante muestra de manera pública, y sin lugar a dudas, predilección o preferencia por alguien, se cristaliza la famosa práctica del «espaldarazo», cuyo nombre proviene de la «palmadita» de apoyo en la espalda que recibe el privilegiado frente a mucha gente.
Conforme fueron pasando los años, el «espaldarazo» se manifestó de otras maneras, igual de evidentes y públicas, por ejemplo: la presencia o no del Gobernador en el evento de tal o cual funcionario; la cercanía o lejanía de la silla en el templete con el Presidente; la ubicación del saludo al inicio del discurso del funcionario; la posición en la foto con «el que manda», en fin, el «espaldarazo» sigue presente y vigente, aunque cambie de forma.
Por lo regular, cuando se avecinan los tiempos electorales, el «espaldarazo» aumenta considerablemente. Se vuelve práctica que define candidaturas y ánimos, además de posibles victorias o derrotas.
¿Cuál de los que buscan suceder al Gobernador Duarte han recibido algún «espaldarazo»? ¿Con cuál de los «tiradores» se ha retratado el Mandatario veracruzano en los últimos meses y dicha foto aparecido en medios? ¿Con cuál «aspirante» se ha notado mayor cercanía que los demás y evidenciado públicamente?
Los años pueden pasar pero la fórmula del «espaldarazo» sigue siendo efectiva. Repasemos dos casos significativos: cuando Patricio Chirinos Calero era precandidato a Gobernador, el entonces Presidente Carlos Salinas de Gortari vino exclusivamente a un evento en su honor, se mostró en público con él, lo «apapachó», y con ello, desmarcó a los demás «suspirantes», no había más qué decir. Cuando Miguel Alemán buscaba la gubernatura, el entonces Mandatario del país, Ernesto Zedillo, mostró su cercanía a través de la publicación de fotografías en periódicos estatales y nacionales, como diciendo: no se hagan bolas, éste es el bueno.
De 10 años para acá, el «espaldarazo» ya no sólo se demuestra en actos públicos, sino también con la asignación de puestos claves en el Gobierno, específicamente, la Secretaría de Gobierno o la Secretaría de Finanzas y Planeación, o bien, con la colocación del personaje favorecido como diputado federal, o bien, Senador de la República.
Formalmente, aún no son tiempos de que los políticos evidencien los «espaldarazos»; no falta mucho, el 7 de junio, cuando los conteos preliminares arrojen resultados de las elecciones, habrá señales más claras, vendrán las fotos, las cercanías, las sonrisas, y entonces sí, cada muestra pública de afecto, será el «espaldarazo» que nos mostrará a todos, los mejor perfilados para la sucesión gubernamental.