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XALAPA, Ver., 31 de enero de 2014.- En caso que en las próximas horas no tengan respuesta positiva a sus peticiones, el Sindicato Estatal de Trabajadores al Servicio de la Universidad Veracruzana (Setsuv) pondría las banderas de huelga en todas las facultades, oficinas e instalaciones deportivas de la UV, según lo comentó Fortunato Pérez, integrante del sindicato.
Este viernes, la capital de Veracruz fue un caos, debido a la protesta del Setsuv que, a menos de dos días para que venza el emplazamiento a huelga, ha palpado el desinterés de la rectora, Sara Ladrón de Guevara para solucionar el conflicto.
De acuerdo al representante del sindicato, no les satisfizo la propuesta de 3.5% de aumento salarial, debido a que es ofensiva para los trabajadores, principalmente porque los salarios han perdido poder adquisitivo ante la crisis económica en que sumió al país el PRI.
Hoy se informó que hubo protestas del Setsuv en por lo menos cinco municipios de la entidad: “Nosotros presentamos tres pliegos petitorios. No nos han hecho caso. No nos quieren escuchar y creen que nos vamos a conformar con cualquier cosa. Queremos que se escuchen nuestras demandas”, añadió.
De parte del sindicato, dijo, no hay intransigencia, razón por la que solicitan que se extienda el diálogo hasta encontrar una solución: “Nosotros hemos presentado la oferta de la UV a los trabajadores y no les satisface. Son cuatro mil trabajadores que están inquietos y esperando una solución”.
Insistió en que la UV debe apurarse para instalar las mesas de diálogo para evitar que el conflicto se alargue, pues de lo contrario, al primer minuto del domingo 2 de febrero se colocarán las banderas de huelga y no habrá ninguna actividad en la UV.
En las oficinas del Setsuv el consejo general de huelga está esperando la llamada al diálogo. De no ocurrir esto, los minutos pasarán y la huelga estallará y no habrá nada que lo evite: “A menos que haya un buen arreglo”, advirtió.
La marcha de protesta del Setsuv provocó problemas viales durante un rato en el centro histórico de la capital. Al poco rato, se marcharon de allí y se concentraron en sus oficinas. Otros regresaron a laborar.