A sus 82 años, doña Eustosia tiene que trabajar; sus hijos la olvidaron

CÓRDOBA, Ver., 28 de agosto de 2015.- En la celebración del Día del Adulto Mayor, algunos ni se han dado por enterados, tal es el caso de doña María Eustosia Palestino, de 82 años de edad, quien todos los días sale de su vivienda, ubicada en Orizaba, para caminar grandes distancias, abordar un autobús y dirigirse a Córdoba a vender mercancía de bisutería.

Para la abuelita, las inclemencias climatológicas no son obstáculo, ya que todos los días tiene que vender y juntar lo necesario para pagar la renta de un cuarto de cinco por cinco, por el cual paga 800 pesos mensuales.

Si no hay venta en Córdoba, doña Eustosia mejor se va para el puerto de Veracruz los días sábados, con la intención de buscar los lugares más concurridos, como las playas, para vender sus aretes y pulseras de fantasía.

Sus dos hijos, uno de ellos radicado en Ciudad Juárez, no se acuerdan de ella, pero doña Eustosia tiene la esperanza de que en cualquier momento llegarán a tocar la puerta de su humilde vivienda. Mientras, continúa vendiendo su mercancía para su sustento.

Asegura que prefiere vender fantasía que pedir limosna como mucha gente, ya que de esta manera es seguro que obtendrá un recurso. Por cada par de aretes Irene una ganancia de 5 a 10 pesos.

Sus 82 años no son impedimento para trabajar y ganarse el pan de cada día.