
Quirino Moreno Quiza/Repechaje
Eulalia Guzmán Barrón (1890-1985): Científica negada por el Estado
El pasado 28 de febrero de 2025, se cumplieron 500 años de los asesinatos de los tlatoani de la Tripe Alianza, entre ellos Cuauhtémoc, y del primer fraile franciscano Juan de Tecto (1475-1523), en el actual territorio del estado de Tabasco. Este aniversario revivió el debate en torno al descubrimiento de los restos de Cuauhtémoc, un tema que ha generado controversia desde 1949, cuando la arqueóloga Eulalia Guzmán Barrón anunció el hallazgo en Ixcateopan, Guerrero.
Desde entonces, el gobierno de la República ha intentado, en múltiples ocasiones, desacreditar la autenticidad de los restos atribuidos a Cuauhtémoc. A lo largo de estos últimos 70 años, se han formado tres comisiones integradas por especialistas en diversas disciplinas con el objetivo de refutar la veracidad del descubrimiento. Sin embargo, muchos han señalado que el rechazo sistemático a los hallazgos de Guzmán podría estar influenciado por el hecho de que fue una mujer arqueóloga quien logró este importante descubrimiento.
Es probable que, de tratarse de un hombre, los restos hubieran sido aceptados como auténticos sin mayor cuestionamiento. Pero en 1949, Eulalia Guzmán, tras una meticulosa investigación que incluyó la consulta a los ancianos de la población de Ixcateopan para recuperar la tradición oral, así como el análisis de diversas fuentes históricas y arqueológicas, logró identificar el lugar exacto donde, según la leyenda, se habrían mantenido ocultos los restos del Huey Tlatoani Cuauhtémoc durante más de 400 años.
A pesar de los esfuerzos por desacreditar su trabajo, el legado de Eulalia Guzmán sigue siendo un testimonio de su dedicación y rigor como investigadora. Su descubrimiento no solo puso en el centro de la discusión la figura de Cuauhtémoc como símbolo de resistencia indígena, sino que también destacó el papel de las mujeres en la arqueología y la historia de México. La negativa a reconocer la autenticidad de los restos podría interpretarse como un reflejo de los prejuicios de género que aún persisten en ciertos ámbitos académicos y políticos.
Algunas conmemoraciones de la maestra normalista Eulalia Guzmán Barrón: en 2024 se cumplieron 75 años del descubrimiento de los restos de Cuauhtémoc en la población de Ixcateopan, en el estado de Guerrero, en septiembre de 1949. El 1 de enero del presente año se cumplieron 40 años del fallecimiento de una de las paleógrafas más importantes de México, quien murió en la capital del país. El pasado 12 de febrero se conmemoraron 130 años de su nacimiento en San Pedro Piedra Gorda, en el estado de Zacatecas. Y el 28 de febrero se conmemoraron los 500 años del asesinato del último monarca mexica.
En conclusión, el caso de los restos de Cuauhtémoc descubiertos por Eulalia Guzmán no solo es un tema arqueológico e histórico, sino también una muestra de cómo el género puede influir en la validación del trabajo científico. Su investigación, basada en la tradición oral y el análisis riguroso, merece ser reevaluada con justicia y reconocimiento, más allá de los prejuicios que han intentado opacar su contribución a la historia de México.
Eulalia Guzmán inició su carrera profesional en la Ciudad de México, en la Escuela Normal para Maestros,en 1904, solicitó una beca al Presidente Porfirio Díaz, para sus estudios. Siendo muy joven, comenzó a laborar como profesora de primaria. Más tarde, estudió arqueología en la Universidad Nacional de México, siendo de las primeras arquelogas de México y continuó con sus estudios de doctorado en Alemania, convirtiéndose en una de las primeras mujeres del país en obtener un doctorado. Su formación es muy sólida. También cabe destacar su papel como pionera del movimiento feminista en el país.
También tuvo una interesante labor como escritora de libros y articulos cientificos, y fundadora del Partido Popular Socialista. https://www.uam.mx/e_libros/biografias/GUZMAN.pdf
Además, tuvo un interesante recorrido en las instituciones públicas del Estado mexicano, donde prestó sus servicios profesionales. Cabe destacar que, durante el sexenio del veracruzano Miguel Alemán Valdés, fue directora del Archivo Histórico del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Por instrucciones del propio presidente de México, encabezó una expedición al pueblo de Ixcateopan, como respuesta a una petición de la campaña presidencial de 1946. Un año más tarde, en el marco del centenario de la invasión militar de los Estados Unidos de América y los acontecimientos del 13 de septiembre de 1847 en el Castillo de Chapultepec, se creó una comisión para la identificación de los cadetes del H. Colegio Militar que cayeron en la defensa del Castillo. Ahí, como quienes dieron el veredicto final eran hombres, no hubo ningún problema (cfr. https://www.dof.gob.mx/nota_to_imagen_fs.php?cod_diario=201781&pagina=2&seccion=0). Luego se discutió la falsedad de las osamentas, lo mismo que ocurrió con los restos de Hernán Cortés. En el caso de Cuauhtémoc, los restos fueron descubiertos por una inteligente mujer llamada Eulalia Guzmán.
El presidente de México, biológicamente mujer pero mental e ideológicamente hombre, con nombre y apellidos Manuel Andrés López Obrador, en un falso festival-funeral de Estadoa Cuauhtémoc, tuvo la gran oportunidad de reivindicar el trabajo de investigación de una verdadera científica como Eulalia Guzmán, que no tuvo como cabecera la lectura del cómic de Kalimán Guzmán. Este pasado 8 de marzo de 2025, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, actuó como su mentor: amuralló el Palacio Nacional y solo conmemoró tan importante fecha con las mujeres que llegaron al poder. Una vez más, demostró que no llegaron todas las mujeres del país: no llegaron las madres de los desaparecidos, ni las madres de los miles de asesinados en los últimos seis años, ni las mujeres desempleadas, ni las secuestradas, ni las trabajadoras sexuales, ni las migrantes, ni las mujeres sin espacios en los estudios universitarios, ni las golpeadas, ni mucho menos llegó el gran aporte a la historia de México como lo es Eulalia Guzmán, quien logró encontrar los restos del último emperador mexica, Cuauhtémoc.