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POZA RICA, Ver., 8 de diciembre de 2023.- De nueva cuenta la familia petrolera se unió, en esta ocasión para celebrar el Día del Niño Perdido, a través de la colocación de velitas en torno al edificio sindical, en donde los trabajadores se hicieron acompañar por sus hijas e hijos, lo que convirtió el momento en una lúcida y vistosa reunión familiar.
Trabajadores y trabajadores arribaron a la explanada sindical, para recibir sus correspondientes velitas, en donde fueron recibidos por parte del Secretario General Electo de la Sección Número 30 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), Andrés Francisco Aguilar Ceballos, quien agradeció la presencia de los asistentes para ser parte de esta importante tradición, en la que se convoca la unión de las familias.
El evento se llevó a cabo en el interés del líder de grupo de la Sección Número 30, Sergio Lorenzo Quiroz Cruz, y del Secretario General, José Juan Soni Solís, de preservar las tradiciones, por lo que se realizó esta convocatoria para iluminar la explanada sindical.
En el evento se recordó que esta tradición se remonta al Evangelio de San Lucas, el cual narra una de las historia acerca de la infancia del Niño Jesús, quien a sus doce años viaja a Jerusalén en compañía de sus padres, sin embargo, éstos lo pierden de vista, y después de tres días lo encuentran en el Templo de la Ciudad, dialogando con los maestros judíos.
Fue en el siglo XVIII cuando el Padre Junipero de Serra se encontraba en plena labor de evangelización en el norte del estado de Veracruz, y como una forma de unir a los habitantes y transmitir un mensaje religioso, convierte esta historia en esta bella tradición, por lo que cada 7 de diciembre, al caer la noche, y en honor a este acontecimiento, se encienden velas que iluminan las calles, a fin de recordar este pasaje e iluminar el camino de Jesús y ayudarle a encontrar el camino a casa.
Este festejo se realizó por primera vez en Tuxpan, en 1974, tradición que se ha extendido a la región norte del estado, Xalapa y algunas áreas de la capital del país.
Se destacó que la importancia de esta tradición radica en la espiritualidad de cada uno de nosotros, que no perdemos la ocasión de mantenernos en unión y comunión con nuestros semejantes.
Los niños y niñas fueron los más entusiastas en participar en este evento, en donde conducían a sus padres a acompañarlos en el encendido de las velitas, y con ello hacer un luminoso camino hacia el edificio sindical.
Es importante señalar que para el desarrollo de este evento se contó con la presencia de elementos de Contraincendio, además de personal médico, para el adecuado desarrollo del evento y evitar la presencia de riesgos entre los participantes.