Teresa Gil/Libros de ayer y hoy

PRI. Mala hierba nunca muere

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Tiro por la culata en realidad viene a ser para los priístas tradicionales, la faramalla planeada por Alejandro Moreno, el llamado Alito, para cambiar toda la estructura del PRI. En realidad lo que hace Moreno no es sino la repetición de lo que hicieron  durante décadas  los presidentes priístas que globalmente gobernaron al país: hacer lo que les daba la gana. Y sus  súbditos lo aceptaban con naturalidad. Los presidentes no cambiaron los estatutos como  fraguó hacerlo Alito, porque no tenía razón de ser; ellos eran el poder y de hecho presidentes del PRI  aunque otro ocupara el puesto. El priísmo tradicional que ahora no puede influir en lo que hace el ex partidazo, solo recibe sopa de su propio chocolate. Más que molestarse y calificar de “daño mayúsculo” las intenciones de Alito deberían de recapacitar que ese daño mayúsculo lo hizo su partido al pueblo de México y luchar no por seguir igual en  busca de un regreso infame de saqueo y miseria, sino de un cambio real para su organismo. Una de las protestantes, Beatriz Paredes, anduvo muy girita con la oposición recientemente, buscando el regreso que anhelan. 

FRENTE A MALAS HIERBAS, MÉXICO ES CAMPEÓN EN BUENAS HIERBAS

 Dado que hierba mala nunca muere, vale mejor recordar las hierbas buenas que han guiado por siglos la salud de los mexicanos. Es un caso que es milenario, el de las hierbas, porque se comparte desde que nuestros ancestros atravesaron el estrecho de Bering: la pasión por aquellas, cualesquiera que éstas sean, siempre que sean benéficas.  En cada mercadito hay un yerbero y no digamos en la capital el famoso Mercado Sonora, que hacen su agosto por el placer del te, las fricciones y  los olores. Países como Alemania, España, Francia, Japón, Italia, Suiza y otros, han creado una gran industria con el uso de hierbas y buena parte de éstas son llevadas desde México. Solo en Puebla, según los expertos, existen  457 plantas y productos mexicanos, que son utilizados en la industria herbolaria.

EL IPN Y LA UACH, PIONEROS EN  LA INVESTIGACIÓN DE HIERBAS.

El Instituto Politécnico Nacional (IPN) , es uno de los pioneros en la investigación de las muchas hierbas mexicanas y su uso en la medicina. Y lo mismo puede decirse de la  Universidad Autónoma de Chapingo (UACH), que además realiza una gran promoción de  sus trabajos en bellas ediciones  dignas de ser más conocidas· En 2011 por ejemplo,  publicó por primera vez  Herbolaria Mexicana, a través del Colegio de Posgraduados, con ediciones posteriores. En ese compendio se tratan 462 especies de herbolaria, pero agrega la lista de los animales medicinales, y un anexo sobre el manejo de plantas, botiquín, preparación, uso, compresas, cataplasmas, control de plagas, etcétera. La verdad es que el colegio debería de hacer una edición sencilla de bajo precio que serviría mucho al gran pueblo mexicano, tan amante de las hierbas. 

PROBEMOS LAS BUENAS HIERBAS Y DESECHEMOS LAS MALAS

La edición que comentamos  trae un cuadro de padecimientos y las hierbas que pueden usarse. Gracias a esas obras nos enteramos que las plantas mexicanas más demandadas a nivel internacional, son damiana, árnica, manzanilla, orégano, valeriana y albahaca, entre otras. Y de los animales medicinales, ¿Qué les parecería un poco de leche de burra, para las alergias,  ungüento de armadillo para la reuma y un caldo de ajolote para la bronquitis?  Nada que ver con la mala hierba priísta, que hoy se debate en una postrimería enfermiza que su propia historia generó.