Ángel Rafael Martínez Alarcón/Rosa Margarita Borunda Quevedo
La obsesiva visión de Carlos Loret en contra del presidente AMLO, se ve enfermiza, y se denomina Trastorno por Ideas Delirantes. Es una enfermedad mental común y es tratada por los especialistas.
Debido a los sesgos de sus contenidos tendenciosos, parecen de alguien afectado por esa enfermedad, que le hace ver como si se tratara de alguien muy dolido o lastimado, por algo que simplemente que no se entiende.
El ex conductor del noticiero matutino de Televisa, en su mal, olvida el daño moral, que causó a varias personas con el caso de la francesa Florence Cassez.
La evidencia de su accionar corrupto y perverso, lo ligó a Genaro García Luna, en esa transmisión en vivo simulada en un caso que dio origen a varios delitos en afán de ganar la exclusiva, y en la realidad sigue abierto el caso en la justicia mexicana. por un actuar falto de ética profesional y junto con las huestes del entonces jefe policiaco ahora en la cárcel en EU.
Loret, además tener cuentas pendientes con la justicia, y denunciado por el propio reportero Pablo Reinah, que fue quien pagó los platos rotos por los delirios de grandeza de Loret en su loca carrera de gran ambición.
Con el periodismo de la nota “inventada, falaz, amarillista y tendenciosa, Loret, pudo hasta emular una película de ficción, porque también fue delatado en como accionó en su momento como corresponsal de “guerra” en Paquistán, que hasta pagó al operador de un tanque, para que se hiciera un disparo de cañón “al aire y vivo en una transmisión”, y simular que se encontraba en el frente de batalla, en en un falso escenario armado en lo que se especializó.
Con una total falta de respeto al público en algo muy viejo como lo es crear la falta noticia y alcanzar “el rating” de la notoriedad a la mala, Loret sigue viento en popa, junto con su “patiño” el payaso Brozo, “hermano”, a quien antes se le vio como “palero” de AMLO, en sus años de lucha electoral, y el payaso periodista soñó, como otros tantos de entrar al paraíso de la abundancia, pero por la sequía presupuestal la prensa se les acabó la ilusión, y se le voltearon al tabasqueño ya siendo presidente, para convertirse en enemigos, detractores y críticos a la mala, al no poder contar con los excesos y las prebendas acostumbrados a los hombres del poder de antes, y ahora: “toma tu paraíso”.
En su última aparición como todo un detractor de AMLO, en su espacio mediático creado exprofeso desde allende a las fronteras, nada más para criticar al presidente y con un supuesto subsidio de algún poderoso priista, Carlos Loret, sin rubor alguno, y con el cinismo de siempre, dice que en el tercer informe presidencial no existe ningún logro, y de un tajo le borra los tres primeros años de cambios al mandato del tabasqueño.
Con sobrada prepotencia, hasta lo reprueba, con su negativa postura de regatearle todo al presidente.
Entonces ¿Cuál es el coraje del periodista en contra del presidente AMLO? Sí el de cumplir con ese beneficio que el político tabasqueño tanto pregona en su gobierno, de que se respeta la libertad de expresión, no hay censura, incluso acepta hasta las peores ofensas, porque está comprometido con el respeto a los derechos humanos. Entonces que le duele.
La visión sesgada de Loret, es dolor, y en su actuar se percibe también que disfruta de vivir haciendo de la imagen del presidente su juego preferido, o más bien su negocio, para hacerse de un nombre, que poco a poco se la ha ido diluyendo, cuando decir prestigio de este personaje pues tampoco, porque son muchos los momentos observados de su emisión, en donde se usa sólo para criticar a AMLO en una verdadera campaña mediática.
Y, sin querer queriendo, además de hacerle el caldo gordo al presidente, quizá hasta lo ayuda a seguir creciendo en la aprobación de sus millones de seguidores de verdad, que con sus pensiones, becas y apoyos siguen en la luna de miel, a diferencia de quienes le regatean al mandatario, todo en una óptica miope y hasta falaz por el dolor de las heridas por las que transpiran como consigna pagada. A saber.
Si no lo quiere, no lo acepta o no le cae bien, que lo evite, más bien parece una campaña dirigida y armada de Loret en contra de AMLO, y que disfruta como el “periodista” vengador, de las fuerzas del pasado. y de esa situación, que hasta le pagan para hacerlo de forma “profesional”.
Carlos Loret, debería escribir novelas de ficción o guiones de cine. Y la realidad, hasta la puede ir mejor por su gran imaginación, que poco le falta hasta para ver marcianos, Como que la cosa esa en la realidad enferma.
Convirtió en su deporte preferido, el “péguele a AMLO”, y por el estilo son varios los que le siguen en ese deporte de moda, aunque la gente no les hace caso a sus falsas percepciones locuaces, pero quieren vivir a costillas de sus posturas de detractores que nunca antes tuvieron con el viejo régimen. Así las cosas.