Raúl López Gómez/Cosmovisión

El tiempo y la trayectoria de Robles Martínez

De aquella ocasión de un colega en estos lares, que decía de la expresión de don José Pagés Llergo, de que sí el chocolate se hace con cacao, los periódicos se hacen con periodistas.

Por eso, hay que reconocer la larga trayectoria profesional en el periodismo del maestro José Pablo Robles Martínez, en este país con muchas acciones, que al paso del tiempo se acumulan y ese es el bagaje que se sopesa en los momentos importantes de toda una vida dedicada a una de las profesiones más difíciles y despiadadas en todo el orbe,

No extraña, que en los momentos de confusión y de cambios en la vida política nacional, hay quienes pretendenaprovecharse de una situación para tratar de subirse al ring con quien no busca conflictos, y menos luchar por las causas perdidas de quienes no tienen el nivel, ni el peso para estaren la rivalidad a su altura.

Robles Martínez, ante todo es un caballero, sí un adalid del periodismo que ha caminado libre por todos los terrenos de la vida, y sin inmutarse al peligro, a las persecuciones y a la censura del poder, desatada en su contra en toda una época, que incluso se puso en riesgo su vida.

Pero, además, después de todo con el paso del tiempo ha sostenido no odiar, no tener rencor, y dejar pasar todas las ofensas que a lo largo de su carrera periodística han osado detenerle, pero no han podido, porque la verdad es la que, en la historia, dice de cada quien, en una sociedad cambiante cada año de generación en generación.

Académico y profesional de prestigio en el periodismo, su trayectoria es la que habla por sí, y no requiere de halagos, y menos de reconocimientos, cuando lo más importante en la vida ha sido superar con fortaleza, todos los obstáculos que se le han presentado en varias décadas de distinguida presencia en los medios de comunicación.

Sensible a los cambios desde su tiempo como maestro y secretario académico de la Facultad de Periodismo en la UV, junto al director de esa época, profesor Alfonso Valencia Ríos, ambos se dieron a la tarea de lograr que las generaciones de egresados, pudieran acceder a las fuentes laborales en todos los campos de los medios de comunicación, la prensa, las relaciones públicas y la publicidad desde los años sesentas y setentas.

Los viajes de prácticas de los alumnos, impulsados por la institución para que conociera las ciudades de México y Monterrey, eran parte del programa académico, salir de la provincia y conocer la realidad del terreno que se iba a pisar con éxito.

Muchos colegas de la Facultad de Periodismo de la UV, emigraron ya como profesionistas: Ignacio Oropeza, Francisco Blanco Calderón, Dámaso Nájera, Cecilio García, Isabel Zamorano, Ana Cristina Peláez, Guillermo Wong, Ada Hernández, Othón Hernández, y muchos más, que fueron parte de hacer camino al andar, y que han dejado en alto el nombre de su alma mater.

Con el paso del tiempo, el maestro José Pablo Robles Martínez, desde un modesto periódico en la Cuenca del Papaloapan y de compartir la cátedra todos los días con sus alumnos, se posicionó como el jefe de redacción del Heraldo de México, el periódico más importante en toda una época en el país.

Después, como director contribuyó con su experiencia a fundar el primer periódico latino en EU, que se llamó Imagen, para luego retornar como director del Sol de México.

Con el paso de los años, se consolidó en el sur del estado de Veracruz, como director de Diario del Istmo, y de esa forma comenzar una gran carrera como empresario de la comunicación, y abrir las puertas de sus medios informativos a todos los estudiantes y egresados de las diversas carreras de comunicación y en general, darles oportunidad laboral a los jóvenes a pesar de no tener experiencia.

Así por sus medios de comunicación han pasado los grandes baluartes del periodismo nacional e internacional, que encontraron en Robles Martínez, al amigo y al maestro con el que tuvieron la oportunidad de comenzar carreras de éxito que los han llevado a muchos triunfos profesionales comoson muchos: Ricardo Ravelo, Daniela Rea, Noé Zavaleta, Ricardo Chua, Ramiro Alfonso, Fernanda Melchor, Vanesa Romero, Ignacio Carvajal Silverio Quevedo, Esaú Valencia, Magda Zayas y muchos colegas más, de la nueva generación de periodistas en boga.  

La trayectoria del maestro José Pablo Robles Martínez, es parte de la historia de este país en los medios de comunicación, y nunca se ha dejado de abrirle las puertas a sus medios informativos a ningún político, al contrario, siempre ha sido de la postura plural, de que a todos se les dé el foro para que expresen sus posturas.

No hay necesidad de pretender quitarle brillo a su larga trayectoria profesional, cuando “Más Allá de la Memoria”, como el título de su libro que escribió de su experiencia como corresponsal de guerra en el Líbano, al final la verdad es la que emerge para enterrar al libelo, a la envidia y al odio, que esgrimen algunos seres humanos, más polarizados que nunca y que no entienden que el mundo cambió. 

Y si alguna vez, hasta le publicaron el epitafio en una esquela falsa, en que le adelantaban la muerte, como un signo de un deseo infame, en otras ocasiones lo han desaparecido y en cada sexenio le han alargado la vida con malos deseos y noticias falsas, en la realidad es que hay Pepe Robles, para rato y ya curado de espanto. Así las cosas.