Desaparecer delito de feminicidio, falta de reconocimiento al problema

XALAPA, Ver., 21 de febrero de 2020.- Integrantes del Sistema Estatal para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres consideraron que la Fiscal está tomando decisiones violatorias a los derechos humanos, porque seguir la línea federal de la desaparición del delito de feminicidio es una falta de reconocimiento del problema que están sufriendo las mujeres.

Recordaron que se ha pedido la Tercera Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres por desaparición forzada, pues éste es un problema serio en el estado.

“No se puede descartar desde un inicio que el asesinato fue por razones de género, y de acuerdo con el Código Penal, la investigación debe iniciar como feminicidio y de ahí ir deslindando para saber cómo se clasifica, y no como ella ha declarado, que todos los asesinatos de mujeres en Veracruz serán tomados como homicidios en primer lugar, eso es contravenir las recomendaciones, el Código Penal y las Alertas de Violencia de Género”.

Por ello, exigieron tender las alertas, “son dos y hasta el momento no han tenido un avance claro, una asignación presupuestal para coadyubar en las acciones planteados por los grupos de trabajo”.

Denunciaron que no se ha logrado aterrizar un programa de trabajo concreto con acciones específicas para dirigir los esfuerzos de cada institución, lo que a cada una le corresponda hacer, y que esto se vea reflejado en la sociedad, en los índices de violencia contra las mujeres.

Al respecto, expusieron el caso de Fátima, pues es ejemplar, paradigmático, porque dio luz a las fallas del sistema de justicia, y dependencias, pues no es posible que no halla dependencias sensibilizadas a este tipo de violencia, como el DIF, que en un comunicado revictimizó a la menor y culpó a la madre y la familia, cuando esto corresponde a una investigación minuciosa.

Las activistas también invitaron a los medios de comunicación a informar con perspectiva de género y ser sensibles ante las familias y sociedad, siguiendo las pautas de respeto mínimo a familiares.