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XALAPA, Ver., 28 de noviembre de 2018.- El Secretario de Finanzas y Planeación del Gobierno del Estado Guillermo Moreno Chazarini, destacó que se entrega un estado con finanzas sanas que permitirán a Veracruz continuar por el camino del desarrollo, toda vez que recordó que en el 2016 se declaró a la entidad en “emergencia financiera” debido a los adeudos, pues el estado estaba en quiebra y en riesgo la operatividad de la por falta de liquidez.
Al comparecer ante los diputados de la Comisión de Hacienda del Estado, el funcionario municipal resaltó la reestructuración de la deuda pública que fue de hasta 46 mil millones de pesos a través de 10 créditos, por medio de 6 empresas financieras.
En este proceso, aseveró se disminuyó la tasa de interés y se generó un ahorro de mil 933 millones que multiplicado por 20 meses, da un total de 68 mil millones de pesos.
Al hablar de las calificaciones de riesgo, dijo que estas mejoraron y pasaron a estable cuando en el 2016, eran negativas, por lo que la reestructura no significa contratar más deuda, remarcó al señalar que el Sistema de Alerta de la Secretaría de Hacienda puede dar fecha de ello y ahora se ubica en categoría “verde”.
Para la reactivación de flujos federales, se presentaron 60, 40 y 19 denuncias penales mismas que permitieron al estado ejercer 4 mil 900 millones de pesos en el 2017, mientras que para este 2018, las participaciones tendrán un incremento de más de 3 mil millones; un monto total de más de 14 mil millones; además de mil 809 millones de pesos se transfirieron a municipios.
En el rubro de reingeniería, se incrementó la recaudación, pero los recursos estatales apenas alcanzan el 7 por ciento, mientras que de recursos federales se destinan el 92 por ciento, por ello, dijo que componer el camino donde se venía de un estado quebrado, se basó en poner orden, credibilidad e impacto social en la administración pública.
“El presupuesto 2017 fue elaborado en base a cifras infladas de ingresos; la deuda publica era de 45 mil 554 millones de pesos y con una proyección que ascendía a 500 y mil 100 millones de pesos, mismo que se restructuró. El costo inflacionario era de 594 millones; además de las tasas exorbitantes, garantías de pago oportuno de hasta el 45 por ciento que comprometían el presupuesto de Veracruz”.
Por último, expuso que a esta situación se sumaba la suspensión de la transferencia de fondos federales, debido a desvíos de la pasada administración, mismas que estaba sujetas a presentar denuncias o devolver el dinero.