Teresa Gil/Libros de ayer y hoy
Se cometió el oso del año
El ingeniero Javier Jiménez Espriu, futuro titular de la SCT, no es un novato del servicio público y ya con muchas horas de vuelo, innecesariamente planteó en un escenario de una empresa privada minera, que muestra el alto grado de autoritarismo y más que nada su desconocimiento de la ley al penetrar por la fuerza con un peligroso desafío a una joven abogada de nombre Susana Rodríguez, que le bailó la bamba y hasta el cielito lindo al personaje que portando sombrero al estilo texano, recordó por el sombrero al profesor Carlos Hank González, a quien se recuerda como todo un caballeros.
Seguramente la joven abogada no tardando será invitada a ser parte del futuro gabinete porque demostró ser una excelente profesional del derecho.
Este hecho muy lamentable en una mina en donde se extraen los materiales para el NAIM, pone a prueba lo que serán los próximos seis años y ojala el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, salga al paso de los que serán titulares de la SCT y la titular del Medio Ambiente, quien también busco los reflectores pero antes de tiempo.
Lo que viene demanda seriedad y legalidad republicana, pero sobre todo mucho respeto a la ley por eso no debe extrañar que AMLO les dé un jalón de orejas, porque no están facultados para actuar y menos para actuar con un autoritarismo insospechado nunca visto por personajes que apenas se van a montar al caballo.
Pareció el hecho reproducido en redes sociales como una chiquillada de ambos personajes, pero se exponen a que se les aplique la ley, porque en cadena nacional por televisión y en la reproducción en todos los medios, se vio como alguno muy peligroso de quienes amenazan antes de tiempo y evidencian una muy mala actitud hasta peligrosa. Y como dicen en el rancho si así está el camino como va a estar la fiesta. Así las cosas.