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XALAPA, Ver., 17 de julio de 2017.- En Veracruz no existe la disponibilidad de lanzar al estado como un destino plenamente cultural, a pesar de que la capital del estado tiene la denominación de Atenas Veracruzana y es la tercera ciudad con mayor capacidad por población de intelectuales, después de la Ciudad de México y Oaxaca, indicó el director general del Instituto Realia, Alejandro Mariano Pérez.
En conferencia de prensa, dio a conocer el Cuarto Festival de Música Infantil las Notas de Guido, el cual le apuesta principalmente al desarrollo a mediano y largo plazo, es decir, al público del futuro que promoverá, consumirá y generará música.
«Xalapa es la tercera ciudad con estadísticas de la cuenta satélite de cultura, y qué estamos haciendo con la tercera ciudad más creativa en la República Mexicana a nivel de política pública, nada. Se nos va el dinero de la política pública estatal y municipal en actos faraónicos para darle pan y circo a la gente. La institución estatal cultural y municipal están olvidando ver al futuro».
Asimismo, expuso que la cultura tiene dos caras, la primera es hacer espectáculos culturales faraónicos con mucha rentabilidad para el lucimiento de un proyecto político o para la ganancia económica únicamente, «el dinero público se gasta en festivales que están programando artistas y espectáculos hipercomerciales y es lamentable que se gaste en ello, sobre todo en contextos de quiebra económica como la que vive Veracruz».
El exdirector del Instituto Veracruzano de la Cultura (Ivec) señaló que la institución estatal no ha creado proyectos para bajar recursos federales en esta materia, pues Xalapa ya tendría que ser declarada por la Unesco como Ciudad Creativa de la Música, como sucede con San Cristóbal, Ciudad Creativa de la Artesanía; Ensenada, Ciudad Creativa de la Gastronomía, y Puebla, Ciudad Creativa del Diseño.
«De qué sirven festivales en donde se gastan varios millones de pesos, si es de auto consumo y no atraen desarrollo económico, y segundo, si es faraónico y únicamente está diseñado para divertir, porque al pueblo pan y circo, y en esta fórmula se ha devenido la cultural y el arte en los últimos sexenios, porque hay que formar a los públicos en clases magistrales, conciertos, captaciones, clínicas y hay que traer expertos para que difundan la cultura».