Roberto Borge está en una cárcel de lujo pero lava los baños

CIUDAD DE MÉXICO, 12 de junio de 2017.- Un periodista encarcelado durante la administración de Roberto Borge Angulo, ahora libre, fue a visitar al exgobernador de Quintana Roo a la prisión en Panamá, en donde se encuentra preso.

Pedro Canché Herrera fue encarcelado durante nueve meses acusado de sabotaje, y ahora libre el comunicador, publicó este fin de semana en su portal de noticias la crónica de su visita al ex mandatario estatal recluido en Panamá.

En el pasado mes de abril, Canché Herrera recibió una disculpa pública por parte de autoridades del municipio de Felipe Carrillo Puerto y el Gobierno de Quintana Roo; y dos meses más tarde, el 5 de junio, la Procuraduría General de la República (PGR) daba cuenta de la detención de Borge.

“Un policía de color informó que el ex gobernador había sido trasladado a El Renacer este viernes 9. Y estaba jubiloso: Ahí va a estar mucho mejor. Es una cárcel para los que tienen plata y puedan pagar al fiscal para estar ahí. Es un lugar cómodo y ahí sí llévele lo que quiera. Su ‘amigo’ tendrá la comodidad gracias a sus abogados”, narra Pedro Canché.

De acuerdo al trabajo periodístico, Fabián Vallado, ex secretario privado de Borge y ex delegado de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) en Quintana Roo, fue a visitar el ahora interno, y en una confusión le hicieron llegar al periodista mensajes para llevarle ropa y artículos que eran en realidad para Vallado.

“Esto Roberto Borge tiene a mostrar un tipo que no ha cambiado, la cárcel todavía tendrá que ser más cárcel para que él pueda reflexionar. Como es nuevo, acaba de ingresar, ingresó apenas el sábado por la mañana que yo fui, él había ingresado por la madrugada, ya le habían leído la cartilla que él va a lavar los baños, se estrenó lavando los baños, lavando la parte de los pasillos y está muy tímido”, describió Canché.

El testimonio del periodista señala que donde está Borge puede dormir en una colchoneta gruesa donde tiene una pantalla de plasma, su baño privado con servicio de agua caliente, y la definió como una cárcel de lujo.

“Guardias desalojen al periodista por favor” -Hola Roberto Borge, soy yo el que vino a visitarlo. Venga acá. Trastabilló con la grava suelta. El tipo se pone pálido.

Cambian sus facciones. Está sorprendido. No esperaba verme ahí. Aprieta las mandíbulas. El rostro sin afeitar se pone colorado.

El gobernador que me puso en la cárcel por sus caprichos de dictador ahí estaba… derrotado.

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