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Toma nuevamente instalaciones de la SEV en Poza Rica
XALAPA, Ver., 20 de febrero de 2017.- El dueño de los Tiburones Rojos de Veracruz, Fidel Kuri Grajales denunció “una persecución” en su contra del alcalde de Boca del Río e hijo del Gobernador del estado, Miguel Ángel Yunes Márquez.
El también diputado federal dijo que los gobiernos estatal y municipal están incumpliendo con la seguridad en el estadio Luis Pirata Fuente, dijo en entrevista con Ciro Gómez Leyva.
El pasado viernes cuando se suscitaron hechos violentos en el juego de los Tiburones en contra de Tigres, sin embargo precisó que no eran policías estatales sino elementos se seguridad privada.
Kuri destacó que el gobierno anterior apoyaba en materia de seguridad con elementos de la Secretaría de Marina, Seguridad Pública, “en los partidos importantes había bastantes elementos resguardando y cuidado a la gente que acudía al estadio y ya no la hay”.
“Este niño, Miguel Ángel Yunes Márquez, actúa como niño, caprichoso y queriendo montarse en algo que es muy delicado, dice que no tiene la obligación de cuidar a los veracruzanos en eventos públicos y privados, y eso está en la ley de Seguridad Pública del estado de Veracruz”.
Kuri Grajales afirmó que lo único que le queda a Veracruz es futbol y que cumple puntualmente con el pago de impuestos al ayuntamiento de Boca del Río. Precisó que hubo un acuerdo con la administración local «y a partir de enero que entró el papá, todo esto cambia».
Dijo que existen ofrecimientos de otros estados como Oaxaca, Sinaloa, Tamaulipas y Sonora para que el equipo se mude de sede, sin embargo está haciendo todo lo posible porque se quede en Veracruz.