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CIUDAD DE MÉXICO, 22 de septiembre de 2016.- Familiares de Alejo Nabor Jiménez Juárez, quien fuera asesinado este lunes en Poza Rica, junto con el sacerdote José Alfredo Suárez de la Cruz, volvieron a exponer su inconformidad por las declaraciones del Fiscal de Veracruz, quien dijo que religiosos habrían ingerido bebidas alcohólicas con sus victimarios y afirmaron que el móvil no fue el robo de los 5 mil pesos, ya que las personas que asaltaron son del crimen organizado y vaciaron las limosnas.
Grupo Fórmula informó que Moisés Jiménez Juárez, hermano del padre Alejo, aseguró que son una banda de cinco hombres y una mujer, los integrantes del crimen que tuvieron que ver en el asesinato de su familiar.
Este jueves el padre Jiménez Juárez, de 50 años, fue sepultado; cabe señalar que el arzobispo de Puebla, monseñor Víctor Sánchez Espinosa, no asistió al entierro, sólo publicó un pésame a través de un boletín.