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XALAPA, Ver., 19 de agosto de 2016.- Francisco Portilla Bonilla, nuevo magistrado del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Veracruz, descartó que su nombramiento se deba a un pago de facturas por parte del gobernador, luego de que no pudiera ocupar el cargo de Fiscal Anticorrupción por la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
«Habría que preguntárselo al señor Gobernador, a quien yo respeto y aprecio mucho y valoró el apoyo que me ha dado, pero habría que ver mis antecedentes», dijo.
En este sentido, señaló que su trabajo al frente a diferentes cargos públicos avalan su desempeño, por lo que su nuevo encargo está respaldado en ello, «habría que ver mis antecedentes, dicen que la alabanza en boca propia es vituperio, pero creo que reúno los requisitos para ser magistrado».
Reiteró que su nombramiento no es un favor político por parte del mandatario estatal, pues ha permanecido fuera de la política los últimos años, aunque ahora, con este nuevo puesto, buscará servir a los veracruzanos desde el juzgado al que sea adscrito, siempre con honestidad, transparencia y responsabilidad.
Consideró que el reto será cumplir con la ley, trabajar por los veracruzanos y hacer que la justicia sea pronta y expedita, aunque fuera de micrófonos apuntó que no concluirá el periodo de 10 años, pues está por jubilarse, «hacer una justicia con un gran sentido de solidaridad con los que menos tienen y con los que carecen de posibilidades de defenderse y que el Tribunal trate de que haya equidad e igualdad para todos«.
Antonio Portilla Bonilla ya fue magistrado, Procurador General de Justicia; Agente del Ministerio Público en los distritos de Xalapa, Papantla, Córdoba, San Andrés Tuxtla, Veracruz y Pánuco, Juez de primera instancia del Poder Judicial, entre otros cargos.