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COATZACOALCOS, Ver., 17 de marzo de 2016.- En atención a una serie de denuncias ciudadanas, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró este jueves, por segunda vez, un predio donde se desarrollaban obras y remoción de vegetación forestal en una duna costera de Coatzacoalcos, donde se ubicaban madrigueras de coyotes (canis latrans).
Cabe señalar que la primera vez que Profepa colocó los sellos, éstos fueron quitados en menos de 24 horas por trabajadores de la empresa que realiza extracción de arena en esta zona.
En un comunicado, la dependencia informó que inspectores de la Delegación de la Profepa en Veracruz realizaron revisión en materia de impacto ambiental al terreno ubicado entre el bulevar John Spark al norte y Avenida Universidad, en dicho puerto.
Los inspectores constataron la existencia de porciones de selva baja subperennifolia, al tiempo que recogieron de los residentes de la zona comentarios sobre la presencia rutinaria de ejemplares de especies silvestres, particularmente de coyotes.
Al momento de la diligencia se pudo constatar también que en el predio en cuestión se han realizado actividades de remoción de vegetación, así como afectación de especies forestales.
De las cuatro hectáreas aproximadas del terreno, las afectaciones abarcan cuatro mil 100 metros cuadrados de ecosistema costero, específicamente duna, así como porciones de selva baja subperennifolia.
Al momento de la inspección, no fue exhibido documento alguno que amparara las autorizaciones en materia de impacto ambiental y cambio de uso de suelo en terrenos forestales, ni se observó la ejecución de programas de rescate para especies de flora y fauna.
Por ello, los inspectores procedieron a ordenar como medida de seguridad, la prevista en el Artículo 170 fracción I de la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, consistente en la clausura total temporal de las obras y actividades realizadas en el sitio.
Durante la visita realizada, no hubo avistamiento de ejemplares de vida silvestre vivos o muertos; sin embargo, por las actividades descritas, es necesario realizar previamente la reubicación de éstos. En caso de que no se acrediten las autorizaciones correspondientes, se sancionarán las posibles infracciones a la legislación ambiental.