Con las mujeres, está garantizado el segundo piso de la 4T: Cuitláhuac
CASTILLO DE TEAYO, Ver., 20 enero de 2015.- La problemática en Castillo de Teayo, que hoy han derivado en una situación de ingobernabilidad, comenzaron a acentuarse desde 2012, cuando los habitantes reportaron una ola de secuestros que alcanzó a un importante número de familias porque sus autoridades no actuaron en su debido momento en contra de los delincuentes.
Desde el pasado 17 de enero, los habitantes de diversas comunidades tomaron el palacio municipal en reclamo al alcalde Enrique Isidro Dimas por irregularidades en la realización de obras, pues el beneficio no se ha concretado.
Con relación a la ola de secuestros que se presentó hasta el año pasado, Alfredo Rodríguez, uno de los voceros, precisó que de hecho el alcalde “prometió a todos policía militarizada, les prometió que se iban a terminar los secuestros, extorsiones y todo y lamentablemente eso no se acabó”.
Los habitantes de Castillo de Teayo contabilizaron 18 secuestros que tuvieron lugar en la cabecera municipal y las comunidades de 2012 a 2015, tras la detención de una banda bien organizada a la que encontraron responsable de esos hechos, y sobre los cuales no vio el actuar de las autoridades de manera oportuna.
La gota que originó el hartazgo en aquella ocasión fue el asesinato del menor Samuel R., ocurrido el 17 de julio de 2015; su cuerpo fue encontrado sin vida y enterrado en un predio de un rancho de la localidad, lo que originó un sonado reclamo del pueblo hacia sus autoridades.
Pese a estas circunstancias, señalan los entrevistados, “Desde que entró la policía simple y sencillamente se ha dedicado a cuidar al presidente municipal, lo dijimos en la manifestación que hicimos hace más de un año; el señor firmó unas minutas ante el Congreso, el Congreso vino, el Congreso dio la cara por él y nos pidió que le diéramos una oportunidad más”, la cual evidentemente decepcionó con las acciones violentas que se generaron la noche del pasado lunes.
Por su parte, Óscar Rodríguez, otro de los manifestantes, señaló: “la gente está cansada de todo lo que está pasando”, mientras se mantiene firme y en espera de una solución de parte del gobierno del estado frente al palacio municipal de ese municipio.
“Defendemos y vamos a defender hasta las últimas consecuencias, pues por las venas de nuestro pueblo no corre atole, y no íbamos a permitir que nos agredieran”.