Asegura Semar una tonelada de droga en puerto de Veracruz
XALAPA, Ver., 23 de noviembre de 2015.- Tras los atentados ocurridos en París, Francia, el pasado 13 de noviembre, hay una repercusión directa tanto en los logros de derechos humanos como en la democracia occidental, indicó el especialista Luis González Plascencia.
En Conexión Veracruz, explicó que “el asunto es complejo, tiene una repercusión directa en los logros de derechos humanos y la democracia occidental”. A partir de los lamentables sucesos que tuvieron lugar en varias locaciones parisinas, los analistas coinciden que la motivación de los grupos terroristas tuvo que ver directamente con la manera de vivir los valores, la libertad y la cultura en el mundo occidental, comentó.
“Paris representa la capital cultural de occidente. El ataque del Estado Islámico se centra en un tema donde no hay posibilidad de negociar. Claramente es un problema de fanatismo que ve en la cultura occidental una amenaza para la forma de vida de las personas que componen el Estado Islámico y cómo conciben el Islam”.
El especialista en derechos humanos dijo que sido la democracia occidental la que pone el énfasis para que los países que lo integran desarrollen la actual concepción de cultura y democracia que se tiene, a través de la cual se logra una convivencia pacífica entre quienes pensamos diferente y tenemos visiones diferentes sobre la vida, por lo que “difícilmente podría negarse, aunque falta mucho por hacer, que es la mejor vía hacia un camino de un modelo de respeto hacia los derechos humanos”, puntualizó.
Sin embargo, señaló que a consecuencia de los atentados se dispararon discursos represores, una postura distinta en el tema de cómo se trata a los refugiados y los asuntos migratorios e incluso una respuesta militar contundente, posturas que se verán reflejadas en las campañas electorales tanto de Estados Unidos como de otros países.
“Una respuesta violenta como la que algunos plantean pondría nuevamente en entredicho los valores que occidente intenta defender, se plantea una paradoja”.
No obstante, la manera en que los atentados han ocurrido desde el 2001 (recordó el ataque a las Torres Gemelas en Nueva York) donde no hay un contendiente que plantee de frente una situación de guerra a otros países, emite una paranoia mundial pues el Estado Islámico se infiltra pacientemente en los países de occidente a través de una “inseminación de ciudadanos”, donde el enemigo puede estar junto a ti en un avión, en el asiento de al lado en el estadio. Esto señala el riesgo de la posibilidad de ataques simultáneos en lugares emblemáticos.
“Ojalá podamos tener una salida que evite una espiral de violencia que todos y todas vamos a lamentar. Si se toma la decisión de hacer una acción contundente, pues que se asuma el costo que esto va a tener en varias regiones del planeta”, finalizó.