Carlos Ramírez/Indicador político
Pepe, el gran interlocutor
He confesado ya en columnas anteriores que no soy especialista en economía y finanzas y que lo poco que sé del tema se limita a la administración de mi sueldo para el sustento familiar, cubrir las necesidades básicas de mi hogar así como compromisos que, como la inmensa mayoría de los mexicanos, tengo con casas comerciales, a las que les debo.
Acaso por eso no acabo de entender la declaración que hizo el pasado jueves 3 el secretario de Finanzas y Planeación, Antonio Gómez Pelegrín, de que para restructurar la deuda pública del estado se requieren al menos 5 mil millones de pesos, ante lo que abrió la posibilidad de que se pida otro préstamo a la banca, según se publicó en diferentes medios (el boletín oficial dijo que el proceso no implica la contratación de nueva deuda, pero que “no se descarta”).
El pasado 27 de agosto, el presidente de la Comisión Permanente de Vigilancia de la LXIII Legislatura, Francisco Garrido Sánchez, informó que la deuda estatal, según documentos oficiales del Poder Legislativo, asciende a 44 mil 470.8 millones de pesos, de los cuales 25 mil 829.6 millones pesos corresponden a deuda directa, 12 mil 659.6 millones de pesos a emisiones bursátiles, y 5 mil 981.6 millones de pesos a bonos-cupón cero.
Por otro lado, lo que llamó “operación cotidiana”, o sea lo que se le debe a proveedores y contratistas, de acuerdo con el último informe trimestral del gasto público entregado a la Legislatura, alcanzó un monto de 3 mil 623.8 millones de pesos, que representa el 3.5 por ciento de los ingresos totales autorizados para el presente ejercicio. Asimismo, informó que la Legislatura no ha autorizado “ningún crédito que traiga consigo el aumento de la deuda pública”.
Pero no, hasta donde se sabe no se ha iniciado ningún proceso de restructura y a lo que se ha limitado la gestión oficial del Gobierno del Estado es a pedir un adelanto de fondos federales del año 2016, del Fondo de Participaciones Federales, que están etiquetados para programas específicos pero que se destinarían para pagar pasivos, por lo que de hecho sólo se contraería más deuda pues para el próximo año no habría ya recursos para obras y servicios de los veracruzanos y se debería más.
Lo que se sabe también es que para poder hacer frente a todos los compromisos pendientes y poder cerrar el año sin estallido social se requieren mínimo 9 mil millones de pesos, por lo que el problema no deja de ser grave.
Prácticamente se ha llegado a un callejón sin salida y acaso por eso el sábado pasado el senador José Francisco “Pepe” Yunes Zorrilla, durante una gira de trabajo por el Totonacapan, en Papantla salió a decir que “El presidente Enrique Peña Nieto no les va a fallar” a los veracruzanos.
Lo dijo con la seguridad de que como presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público del Senado, pero como veracruzano también, para el Gobierno Federal ha quedado como el único interlocutor válido para tratar sobre la restructuración de la deuda, que en la Sefiplan no han iniciado, pero además a través de quien bajarán los recursos para pagar a los acreedores, contratistas y prestadores de servicio, quienes se acercaron al senador para pedirle que hiciera algo por todos ellos, por sus familias, sus empresas y sus trabajadores, petición que recogió y llevó ante la instancia federal, donde le dijeron que sí pero que será a través suyo como fluyan los recursos. Les van a pagar antes de que concluya el año. Pepe lo ha logrado, por fin.
Pero la buena noticia alcanzaría a la Universidad Veracruzana, pues antes de que termine el año también, tan pronto como que podría ser este mismo mes, le podrían llegar ya los recursos federales en forma directa sin pasar más por la Sefiplan, lo que igualmente podría ocurrir con los Ayuntamientos a los que sus participaciones federales les llegarían en forma directa a partir de enero próximo, para lo que ya se hacen las adecuaciones legales. Le van a cortar, pues, el cordón a la licuadora.
Lo que se sabe es que Pepe sigue firme en el anuncio que hizo el pasado 23 de agosto en Tecolutla cuando dijo que la deuda de Veracruz implicaba la necesidad de una reestructura cuyos términos ya negociaba con las instancias federales correspondientes y que desde una semana antes había comenzado a trabajar con el Gobierno Federal en relación con los términos de dicha reestructura.
Pero en Veracruz no han comenzado dicho proceso sino que se han limitado a pedir un adelanto de las participaciones federales 2016 comprometiéndolas desde ahora con fines distintos para las que están programadas, a lo que el senador se opone rotundamente pues la medida implica más deuda, aunque también está consciente que sin ese recurso el Gobierno del Estado no podrá cerrar bien el año cumpliendo sus compromisos, y quienes van a pagar las consecuencias serán los veracruzanos, lo que podría llevarlo a flexibilizar su postura por una razón de estricta solidaridad con los veracruzanos, pero no está de acuerdo y se opone. Lo único que acepta es la restructura, que urge.
El pasado lunes 31 de agosto se informó que el gobernador Javier Duarte trataría ese mismo día por la noche el tema de la restructura con el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, y con el subsecretario de Egresos, Fernando Galindo. En la reunión no estuvo el primero, pero las cosas de todos modos no habrían salido bien, pues habría tenido el reclamo de recursos pendientes por devolver porque para la SHCP no se han solventado las observaciones de la Auditoría Superior de la Federación y las denuncias ante la Procuraduría General de la República siguen abiertas.
Pepe Yunes Zorrilla de todos modos sigue pendiente de la correcta aplicación de recursos federales en el estado. Eso le dijo el sábado a los vecinos de Espinal, en la sierra del Totonacapan, quienes en su mayoría taxistas bloquearon el tramo carretero Entabladero con Melchor Ocampo como protesta por el mal estado en que se encuentra el camino y que supuestamente sería inaugurado por el senador cuando no está concluido. Alguien los aceleró en contra del legislador, pero este se presentó y platicó con los inconformes. Les explicó que los trabajos se hacen con recursos que él ha bajado, que antes manejaba la Secretaría de Comunicaciones y Transportes pero que por una reforma se habían transferido para que los administrara el Gobierno del Estado y que precisamente la gira era para supervisar cómo iban los trabajos, por lo que la protesta resultaba oportuna. Se comprometió a volver esta semana con las autoridades correspondientes del estado y los contratistas responsables para que den explicaciones.
Se cayó visita de El Bronco
La visita que haría el jueves 10 al puerto de Veracruz el gobernador electo de Nuevo León, Jaime Heliodoro Rodríguez Calderón, El Bronco, para recibir el nombramiento de “visitante distinguido” por parte del Ayuntamiento priista porteño, se cayó. Según, se habría enfermado su esposa a la que habrían intervenido quirúrgicamente, además de que al personaje se le habría complicado su agenda. Tenía pensado también ir a descansar el fin de semana a Tlacotalpan.
Este lunes rinde su informe la Rector
Bajo el lema “Tradición e Innovación”, este lunes a las 19 horas rendirá su II Informe de Actividades 2014-2015 la rectora de la Universidad Veracruzana, Sara Ladrón de Guevara. Será en la Sala Tlaqná del Campus para la Cultura, las Artes y el Deporte en Xalapa… También, están por circular las invitaciones del Gobierno del Estado para la ceremonia del tradicional Grito la noche del 15 de septiembre, casi dentro de una semana.