Con 3 pesos, Damaris come sano en comedores comunitarios

XALAPA, Ver., 26 de agosto de 2015.- Damaris Landa, su papá, su mamá y sus dos pequeños hijos gozan día a día los beneficios de la Cruzada Contra el Hambre que otorga la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) en la colonia Une-Pri, en esta capital.

Ella, a sus 38 años, fue una de las primeras mujeres que ayudaron en la fundación del comedor comunitario Sin Hambre en su colonia, donde gracias a ese espacio, actualmente 120 personas se alimentan dos veces al día de manera sana.

Comentó que hace poco más de un año representantes de la Cruzada Contra el Hambre llegó a la colonia para platicarles del proyecto que buscaban implementar en ayuda a los vecinos, “empezamos apoyando a los muchachos de la Cruzada y poco a poco se fue logrando con gestiones y con ayuda de las vecinas y los vecinos y se nos hizo, nos cumplieron”.

Paso seguido, Damaris comentó que llegó un grupo de soldados para capacitar a las personas que ayudarían en el comedor, entre ellas Damaris, quien entró como cocinera. Los soldados estuvieron una semana, enseñándoles sobre la cocina y los cuidados dentro de ella.

El 28 de agosto de 2014, el comedor entró en función y hasta hoy dice “poco a poco se ha ido logrando”.

Su familia goza de este beneficio del comedor Sin Hambre. Comentó que su padre es electricista y es el sustento de su casa, por ello el comedor les ha ayudado a tener menos gastos ya que por comida pagan una cuota de recuperación de 3 pesos.

Sobre su experiencia en el comedor comunitario, comentó que “es bonito porque participas con la comunidad, con los vecinos. Prácticamente somos familia, nos sentamos a comer, platicamos todos con todos y de todo”.

Damaris Landa, el día de hoy, y como regalo del primer aniversario del comedor, será acreedora de un filtro de agua potable, con el que antes gastaba 14 pesos en un garrafón de agua cada 2 días,  “pues eso que me gastaba lo voy a ahorrar” concluyó.