Veracruzanos realizan Segunda Jornada Nacional de Coros y Rondallas
XALAPA, Ver., 15 de junio de 2015- En el desayuno que ofreció el gobernador Javier Duarte de Ochoa a los periodistas, los amables empleados de la Coordinación General de Comunicación Social (DGCS) recibieron a los invitados; por supuesto, no podían faltar los colados para festejar el Día de la Libertad de Expresión, que se celebró el pasado 7 de junio. Unos llevaron el pase, otros fingieron que se les “había olvidado”, otros más llegaron con su familia y algunos dijeron que trabajaban en el New York Times.
La cita fue a las 9:30 de la mañana; el Gobernador llegó puntual, saludando y saludando. Todos se querían tomar la fotografía con él y acostumbrado a los flashes se dejó apapachar sonriendo. Vestía impecable, camisa color rosa, saco gris, pantalones al tono y zapatos negros. Atrás, Juan Octavio Pavón, coordinador general de Comunicación Social, portando un traje gris con pequeñas rayas, camisa blanca, corbata amarilla y zapatos negros. No sonreía para nada.
Los asistentes conocidos se saludaban y se palmeaban los hombros; entre los desconocidos se apretujaban a la entrada del Salón Ghal, donde fue el evento repleto de mesas cubiertas de manteles blancos y sin ningún adorno floral.
La mayoría de los caballeros vestidos de trajes, guayaberas, otras de camisas, entre ellos un servidor. El juvenil saco de lino de Pompeyo Lobato Ortiz, lo lucía muy bien, acompañado de su inseparable sombrero panameño.
Combinación escogida de saco color camello y pantalón negro con corbata, el tono de Ramsés Yunes.
Las mujeres sacaron a relucir sus mejores galas como Ángeles González, Fanny Yépez, Hylcia Trujano, Eleaney Sesma y Jacinta Meza, con un traje de dos piezas en blanco y negro que parece es el oficial, ya que en todos los eventos y fiestas lo lleva puesto.
El gobernador Javier Duarte de Ochoa habló por más de 15 minutos sobre el quehacer periodístico de los veracruzanos, lógico, tocó las votaciones pasadas, hizo chiste y hasta tuve que ver con estos comentarios, por supuesto, las carcajadas se soltaron en la mesa principal que también compartí con el Góber y varios colegas. Antes de finalizar su discurso pidió un aplauso para el amigo Noé Valdés, quien lamentablemente falleció el día de hoy.
El ejército de meseros sirvió tazas y más tazas de café mientras se hablaba de varios temas de actualidad. Llegó la fruta con la piña, con un sabor un poquito “atepachado”, siguió el plato fuerte, tamal de cazuela bañado en fríjoles, y a un lado, una rebanada de plátano frito. Seguían y seguían las tazas de café.
Una voz retumbo en el salón para decir que el Gobernador abandonaba el lugar y nuevamente, como avispas, los periodistas lo rodearon y hasta un autógrafo firmó. Por supuesto otra media hora de fotografías.