Los mexicanos en Estados Unidos están con Kamala Harris
“El gran pequeño”, una cinta entretenida y tierna
Si bien hablamos de una cinta hecha por mexicanos, que refiere a una relación estrecha entre padre e hijo, “El gran pequeño” (Little Boy) no es ni con mucho, un filme parecido a “No se aceptan devoluciones”, con la cual ha sido comparada por muchos.
Este largometraje, dirigido por Alejandro Monteverde (Bella, 2006), está hecho con verdadera calidad, no ha sido inflado por las televisoras –al menos hasta ahora-, aunque no tuvo en Estados Unidos el recibimiento taquillero que se esperaba, pues apenas ha recaudado 5 de los 26 millones de dólares que costó.
La historia gira entorno a un niño buleado, que sin problemas puede pasar desapercibido en su entorno y que sustenta su existencia en el amor por su padre, hasta que éste tiene que alejarse de él. En un entorno mágico amoroso, el niño pone todo su empeño en regresar a su padre de la guerra y en conseguir que esta termine.
La primera peculiaridad del filme, radica en que la producción corrió a cargo de Eduardo Verástegui, un mexicano que hace algunos años identificábamos por su trabajo telenovelero, pero que a fuerza de insistir, se ha hecho un lugar en el cine y más aún en el mercado hollywoodense, situación complicada en todos los sentidos.
Verástegui además, se encargó de escautear al protagonista, del cual cuenta, es un niño autista con el que fue bien complicado trabajar, aunque el resultado final, es sumamente bueno. Asimismo, el actor mexicano interpretó tres papeles en el filme, completamente distintos cada uno de ellos.
Además de Verástegui, la película en la que actúan Kevin James, Emily Watson, Michael Rapaport y Tom Wilkinson, fue filmada en locaciones de Rosarito, Baja California, con paisajes memorables, aunque para ello, se apoyaron en la fotografía de Andrew Cadelago.
Un filme bastante entretenido y digno de recomendación, del cual es preciso aclararle al público lector, que como estreno de la semana, sino recauda la taquilla suficiente, sale de cartelera, así que lo invito a que asista a verla.
Sólo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias, escríbame al correo electrónico [email protected]