Cirio pascual, uno de los elementos más importantes en Semana Santa

XALAPA, Ver., 30 de marzo de 2015.- En la Semana Santa, celebrada conforme a las creencias de la grey católica, hay elementos y simbolismos muy significativos que no deben omitirse, como el pan eucarístico y la cruz, pero quizá uno de los más importantes sea el cirio pascual.

Al respecto, el vocero de la Arquidiócesis de Xalapa, José Manuel Suazo Reyes, comentó que en esta época de crisis económica no importa el tamaño o el diseño de esta vela de representación especial, aunque enfatizó la importancia de que sea un cirio nuevo el que sea encendido en cada pascua.

“Este es el símbolo por antonomasia de la Vigilia Pascual y muy importante porque representa a Cristo resucitado; es lo primero que se enciende del fuego nuevo, de la resurrección que se bendice en la fiesta pascual; al comienzo de la celebración del Sábado Santo el único fuego que debe estar encendido es justamente el de este cirio consagrado”.

El presbítero de la Parroquia María Auxiliadora refirió que tras la celebración eucarística de ese día los feligreses llevan esa luz a su casa desde el cirio consagrado en el altar mayor de cada templo católico.

Suazo Reyes indicó que se debe encender durante los próximos 50 días, y explicó que los creyentes piensan que les ayuda a enfrentar situaciones difíciles en el hogar, “por tanto que cada vez que tienen algún problema lo encienden con devoción, porque Cristo se hace presente”; abundó que si bien en el mercado hay un sinfín de diseños, jamás le faltará el color rojo, que representa la sangre derramada por el Salvador el día de su muerte.

“Por eso la feligresía le tiene mucha fe, de hecho el cirio pascual después de la vigilia se debe encender en todas las celebraciones litúrgicas tras 50 días, que es el tiempo pascual; se enciende en las iglesias cuando se celebran sacramentos como el bautismo, la confirmación y cuando se hace la primera comunión; en el hogar cuando se tiene una dificultad o necesidad en especial, alguna enfermedad”.

No obstante, enfatizó que cada vez que este símbolo es utilizado debe ir acompañado con una oración; “en resumen, el significado es que a través de esta vela consagrada uno se encomienda a Cristo y con esa luz tiene más claridad en esas situaciones difíciles, en esas adversidades, por ello es uno de los elementos más importantes de la Semana Santa y los católicos le apreciamos mucho, con gran veneración”.