Carlos Ramírez/Indicador político
¿Pagarán aguinaldo en los municipios?
Hace unos días manos poco escrupulosas echaron a volar por las redes el run-run de que este año no habría aguinaldo para los maestros. Como es de suponerse, los mentores se pusieron nerviosos y retuitearon el mensaje que ocasionó un pequeño conato de pánico al grado que tuvo que salir al paso el líder magisterial Nicolás Callejas Roldán, a asegurar que los maestros no sólo cobrarán su aguinaldo sino otras prestaciones a las que tienen derecho. Y con esto calmó el nerviosismo y futuras broncas.
Que se sepa a los maestros y a los policías nunca les han dejado de pagar esta prestación. Pero qué tal con los demás burócratas.
Todavía en el trienio anterior, el entonces alcalde de Tamiahua, Francisco López Díaz “El Bolita”, dejó colgados de la brocha a los trabajadores con varias quincenas atrasadas y con el aguinaldo. En un principio optó por correr a los que se le pusieron al brinco, pero cuando se dio cuenta que se estaba quedando sin personal en la presidencia municipal hizo dos cosas: dijo que no pagaba porque no tenía dinero y se echó a los brazos de Baco, por aquello de que borracho y dormido no se siente lo jodido.
Pero el problema creció al grado que cuando dejó el cargo el “Bolita” lo hizo en medio de sonoras mentadas de madre, de esas que tan bien les salen a los tamiahuenses.
Pero la falta de liquidez monetaria continúa en ese municipio ya que hay quincenas en que no se paga a todos los trabajadores. Varios han sido despedidos pero tampoco hay dinero para sus liquidaciones. Del aguinaldo mejor ni hablar, cada día crece el rumor que este año los burócratas se volverán a quedar chiflando en la loma. Y aumenta cuando el alcalde Martín Cristóbal evade el tema.
Se calcula que más de la mitad de los presidentes municipales veracruzanos se están tronando los dedos porque diciembre está a la vuelta de la esquina y no hay dinero para el aguinaldo.
¿Qué hacer?
Hace unos días la presidenta municipal de Jilotepec, María de Lourdes Lara López, se dejó caer por el Congreso estatal con la finalidad de que los diputados le hicieran el paro con un milloncito de pesos a fin de hacer felices a los burócratas jilotepenses esta Navidad. Pero los diputados, que no le dan agua ni al Gallo de la Pasión la mandaron por un tubo. Y es que si le prestaban a ella tendrían que prestarle a más de 100 alcaldes.
Por donde se le vea el problema no es menor. Bajita la mano son 200 millones de pesos los que necesitan con urgencia más de 100 municipios nomás para pagar aguinaldos. Eso sin contar los adeudos a proveedores que están esperando diciembre para que les abonen algo y tengan a su vez para pagar esta prestación a sus trabajadores.
La bronca es que el gobierno del estado no tiene ni un clavo y no va a soltar ni un peso. En contraparte, la Federación sí tiene dinero pero no lo suelta en tanto no le justifiquen gastos atrasados, cosa que no han hecho la gran mayoría de los municipios.
Repito ¿Qué hacer? Una solución sería hacer rifas, sorteos o bailes. Otra, que los alcaldes se pongan una borrachera de órdago como las que se ponía el “Bolita” López Díaz y que lo hacían olvidarse de las broncas económicas que tenía con los burócratas tamiahuenses.