Carlos Ramírez/Indicador político
Dos tuxpeños serán líderes estatales
Después de 25 años de existencia los perredistas están aprendiendo a hacer elecciones. En sus comicios del domingo 7 y contra lo que se llegó a pensar, nomás hubo 582 quejas por robo de urnas, acarreo de votantes, entrega de despensas y otras minucias. Una bicoca comparada con las broncas aquellas en que las tribus se agarraban del chongo en una descomunal batalla campal que terminaba cuando el Tribunal Electoral declaraba nulas las elecciones.
Esta vez no fue así y el triunfo se lo llevó la corriente de los Chuchos (Zambrano y Ortega), que siguen manteniendo la hegemonía y abren las puertas para que el tuxpeño Rogelio Franco Castán sea presidente estatal del PRD, cosa que le vendría de perlas al alicaído partido que últimamente ha visto menguar drásticamente el número de sus militantes.
Por el lado del PAN José de Jesús Mancha ya es presidente estatal del blanquiazul, nomás falta confirmarlo, con lo que será un hecho inédito que ambas dirigencias sean ocupadas por tuxpeños.
Si bien no son los grandes cuates ni se van a tomar la copita juntos, Rogelio y José de Jesús mantienen una amistad de esas que los políticos llaman institucional y esto podría servir a sus partidos en el futuro cercano.
Tanto el PAN como el PRD están en crisis (en el caso del Sol Azteca la crisis es crónica) pero ambos tuxpeños tienen el talento suficiente para sacar a flote a sus respectivas naves.
Aunque es difícil que vayan en alianza el próximo año, nada descabellado sería que lo fueran en la elección para gobernador y eso metería en un brete al PRI. Son meras especulaciones pero en política nada es imposible y si esto sucede… ¡uuupppsss!
Veremos qué pasa entonces
La inauguración
Si no acontece nada anormal, como que se desgaje un cerro o los campesinos cierren un tramo, estamos a dos días de que el presidente Enrique Peña Nieto inaugure la anhelada, esperada y soñada autopista México- Tuxpan (guau, qué emoción), que traerá una avalancha de progreso a los tuxpeños y a los habitantes de la zona norte del estado. Al menos es lo que nos han cacareado desde hace años.
Como dije hace unos días, la autopista fue esperada por generaciones ya que de Alemán a De la Madrid, la prometieron todos los presidentes cuando fueron candidatos. Carlos Salinas la comenzó y Felipe Calderón casi la terminó pero le faltaron 36 kilómetros, por lo que las palmas se las llevará el presidente Peña Nieto.
Pero no te creas que nomás será subirse al auto e ir de Tuxpan a México en tres horas. No señor, habrá que pagar dos casetas (en realidad tres con la que está cerca del ex lago de Texcoco) y hasta el momento es un secreto el costo de la tarifa pero seguro será un buen billete. Aunque valdrá la pena el gasto con tal de recorrer y disfrutar esta monumental obra de ingeniería.
También este mes se dará a conocer el nombre de quien se encargará de construir la autopista Tuxpan-Tampico y de acuerdo con fuentes bien informadas hay empresas españolas, brasileñas y por supuesto mexicanas interesadas en su construcción.
Por lo pronto bienvenida la autopista México-Tuxpan y bienvenido el progreso a mi querido puerto que tanto lo necesita. Nomás espero que tanto progreso no los vaya a atropellar.