Quirino Moreno Quiza/Repechaje
Tesoros de Xalapa, enterrados por la indiferencia de su gente
Xalapa, y toda la entidad veracruzana, tienen la fortuna de estar rodeados de riqueza natural, pero también histórica y cultural, aunque desafortunadamente, ya para muchos ciudadanos estos tesoros, orgullos nacionales, pasen desapercibidos.
Los propios encargados de promover el turismo en la llamada Atenas Veracruzana desconocen todo lo que hay detrás de estas obras de arte, por lo que aún estamos a tiempo los ciudadanos de rescatarlas.
Desde hace ya muchos años, doña Alicia Fernández de Ávila, acompañada de otros veracruzanos enamorados de esta ciudad como Gela Frutis, realizaron un trabajo incansable a través de la asociación civil Adopta Una Obra de Arte. Así, lograron rescatar el mural del Hospital de los Ferrocarriles Nacionales de México.
Dirá usted: ¿Y dónde está eso? Pues en lo que hoy conocemos como la Clínica del IMSS. El mural fue nombrado como El Héroe de Nacozari, realizado en 1958, con mosaico de vidrio en el muro exterior del Hospital de los Ferrocarriles Nacionales de México, por el artista potosino Francisco Eppens García. Hoy lo tapan camionetas que se ponen a vender tomates y un buen tanto de basura. Está justo para dar la vuelta a lo que conocemos como el Antiguo Camino a Coatepec.
Ahí mismo está la plazuela de la cruz, que se encuentra a un costado del mural El Héroe de Nacozari. Si bien cuenta con varios accesos peatonales, teniendo como principal característica la esquina o punta del cerro la cual tiene una espléndida vista hacia la zona urbana, convirtiéndola en punto clave para la población que la rodea, hoy son pocos los que la conocen.
Otro de los rescates que hiciera Adopta Una Obra de Arte, es el Templo de Chiltoyac, consagrado a Santa María de la Asunción. Los filántropos aseguran que fue posiblemente edificada en la segunda mitad del siglo XVIII, por lo que se encargaron de restaurar varias pinturas de los siglos XVIII y XIX, entre las cuales está un interesante Jesús, el Buen Pastor, de la segunda mitad del siglo XIX, de factura popular. Muchos tienen toda su vida viviendo en Xalapa y jamás han puesto un pie en el sitio.
Se cuenta también el Monumento a la Madre, el cual si bien para muchos es un punto de referencia en la avenida Ávila Camacho, lo cierto es que su valor artístico ha sido relegado. El obelisco recubierto con mosaico italiano, es una obra diseñada en 1960 por el arquitecto Sergio H. Besnier, con una escultura fundida en bronce de una mujer que levanta los brazos con un pequeño niño, obra del escultor José I. Ruiz Hernández.
La Antigua Capilla de Las Ánimas, del siglo XVIII, está a un costado del centro comercial, conserva un pequeño retablo con estípites y dos grandes lienzos con alegorías firmados por el pintor poblano Miguel Jerónimo Zendejas, pero, a decir de los curadores, desafortunadamente repintados. Junto a un pequeño bautisterio, se encuentra un gran óleo, con una representación tradicional de la Virgen de Guadalupe, que se restauró por una adopción de la asociación civil.
Aunque la escondida oficina municipal de Turismo no los incluya en sus folletos, vale la pena adentrarse un fin de semana en la capital para conocer estos y otros tesoros arquitectónicos y artísticos que tiene.
@YamiriRodríguez