Números Rojos

Strippers y Política

Conforme íbamos llegando al salón, nos pedían a las invitadas que tomáramos asiento en unas sillas colocadas en forma circular. Posteriormente los meseros nos ofrecían algo de tomar.

Así estuvimos unos minutos más, esperando a que llegara la mayoría de invitadas.

De repente, sonó la música y apagaron la luz. Una luz tenue fue iluminando la pista y un joven apareció bailando de manera candenciosa.

El chico venía vestido de bombero y empezó poco a poco a desvestirse hasta quedar simplemente en un sexi bóxer negro.

Desde luego que cada vez que el joven stripper se quitaba una prenda, más de una gritaba, siguiendo con el guión establecido para una tradicional “despedida de soltera”.

Poco a poco, el joven stripper fue acercándose a cada una de nosotras que permanecíamos sentadas, incluso abría las piernas alrededor de la silla para estar solamente a unos escasos centímetros de nuestra cara y bailar con “un movimiento sexy” (tal y como lo dice la canción). Desde luego que los gritos se hicieron cada vez más fuertes.

Tristemente llegó mi turno, y digo tristemente, porque en lo particular, me desagrada esa cercanía de un desconocido que exhala cerca de mi cara. ¡Sí! ya sé que algunas me tacharán de tonta o hipócrita, pero realmente lo mío no es el show de strippers. Debo reconocer que el muchacho es guapo, baila bien, hace bien su trabajo, pero es claro que en lo particular, me hizo sentir incómoda y no fui la única, más de una que “ya sabía del asunto”, se retiró discretamente antes de empezar el show.

II

Ésa ha sido mi única experiencia con strippers y lo recordé por una nota que leía el fin de semana en donde habían llevado strippers a un evento panista. Sí, leyó usted bien: p-a-n-i-s-t-a.

No es que sea espantada, pero “generalmente”, los panistas son considerados “medio mochos” (aclaro, no todos), pero ahí tiene los casos de las prohibiciones de minifaldas y escotes en estados con gobernadores de esa extracción partidista.

El caso es que el pasado miércoles, citaron a varias mujeres afiliadas a ese partido en el Hotel Hilton Alameda, con una invitación que rezaba “Amiga panista: te invitamos a participar en el foro de Movimiento Almas en Equidad. Mujeres Abriendo Espacios en el DF”.

El evento, “supuestamente” organizado para apoyar al candidato a la Dirigencia del PAN Gustavo Madero, contó con la asistencia aproximada de 250 mujeres las que se vieron sorprendidas por tres strippers que llegaron bailando y se quitaron la camisa para continuar con su show por veinte minutos más.

“El espanto” no se hizo esperar y de inmediato solicitaron la investigación de tan “carnoso asunto” y como siempre pasa, todos se deslindaron del evento, y no faltó el contrincante Ernesto Cordero quien salió a decir que el suceso “era denigrante” para las mujeres panistas.

Creo que el querer ganar le hace usar a Cordero una palabra demasiado fuerte para algo que realmente resulta “incómodo” para algunas mujeres no acostumbradas o no afectas a esos espectáculos.

Realmente, los strippers que fueron contratados para tal evento, no son “denigrantes” y que lo único que hicieron fue su chamba. “Denigrantes” pueden ser incluso los mismos políticos y sus acciones para con los gobernados.

III

Pero no sólo en el DF se cuecen habas, también en Veracruz, pues comentan que en las fiestas populares de Juan Rodríguez Clara, autoridades municipales promueven la feria de la Piña con espectáculos de Table Dance y strippers. Al menos así lo promocionan en las páginas oficiales del Ayuntamiento y en cuentas de facebook. Lo anterior lo dio a conocer una nota del Portal Cambio Digital, pero posteriormente fue bajada.

La información mencionaba como cita, el sábado pasado en punto de las diez de la noche y decía: “te invitamos a que apoyes a tu candidato favorito en el salón de usos múltiples, este gran evento será conducido por Perfecto Uscanga, habrá show stripper y show de mujeres, además Disco Nitro, amenizará…No faltes!”

Quién sabe si se realizó o no tal evento.

Es triste ver que se tenga que recurrir al sexo para vender, para que la población acuda a algún evento o para gobernar. Más triste resulta esa táctica cuando proviene de una mujer como Amanda de Gasperín, alcaldesa de ese municipio.

En una semana, los escándalos los han dado los partidos políticos: el PRI con la red de prostitución de edecanes, y el PAN con su deslinde moralino de los strippers, sólo espero que el PRD no salga con algo peor.

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