Quirino Moreno Quiza/Repechaje
Aunque siempre hay quienes encuentran el prietito en el arroz, lo cierto es la reciente adquisición de Petróleos Mexicanos (PEMEX), de la productora de urea, Agro Nitrogenados de Coatzacoalcos, fue un acierto de la Federación para poder reactivar el campo en el país con la producción de fertilizantes a un mejor precio para el productor y, en carambola, es un gran impulso también para la zona sur de Veracruz.
Y es que quienes saben de estos temas consideran que al arrancar de nueva cuenta los trabajos esta planta, se reactivará la industria petroquímica secundaria, se reiniciará la producción nacional de fertilizantes y se garantizará la productividad futura del campo.
Pero además, entre los beneficios que traerá, está el apuntalar el proyecto de reforma al campo mexicano que este 2014 abordarán los congresistas así como otorgar un elemento adicional para garantizar la soberanía alimentaria de México.
Con la adquisición de Agro Nitogrenados, se reconstituyen las cadenas productivas de país, se sustituyen importaciones dando un beneficio adicional a la balanza comercial de México, se promueve el Desarrollo de Proveedores Nacionales y, lo más importante para la región, se generan por lo menos 2 mil empleos directos e indirectos.
En un comunicado emitido por la paraestatal el pasado 16 de febrero, se explicó que PMI, empresa filial de Petróleos Mexicanos, firmó un contrato para la compra de los activos de la empresa Agro Nitrogenados, S.A. de C.V. Con esta compra, Pemex reactivará la producción de hasta 990 mil toneladas anuales de urea en Pajaritos, a partir de 2015.
El proyecto considera una inversión de hasta 475 millones de dólares, incluyendo la compra de activos existentes, así como la rehabilitación y renovación de la planta. La producción esperada de urea representa cerca del 75% de la demanda nacional actual de este insumo estratégico para el agro nacional.
La producción potencial de la planta podría sustituir la importación de fertilizantes por más de 400 millones de dólares anuales. Sin embargo, se busca también reconstituir el mercado interno de esta industria y orientar el producto hacia los sectores de menor nivel de desarrollo económico en el país, ubicados en la región sur-sureste del país.
El amoniaco –dice-, será suministrado por el Complejo Petroquímico de PEMEX, ubicado en Cosoleacaque, a solo 28 kilómetros de las instalaciones de Agro Nitrogenados. Asimismo, una vez terminada la rehabilitación de la planta, la operación estará a cargo de técnicos y operarios de Pemex.
Y es que desde 2010, los mismos sindicatos que habían operado las 4 plantas agroquímicas de la región –dos de ureas y dos de nitrato-, han pugnado porque la inversión, cercana a los 35 millones de pesos se diera, a fin de recuperarlas, pues estás enfrentaron los embates de la crisis económica y los altos costos de la piedra fosfórica, cuando eran manejados por el Consorcio Innophos, además claro, de años de paro técnico.
Incluso, el 30 de septiembre de 1998, la empresa Agro Nitrogenados, S.A. de C.V., por conducto de su representante legal, compareció ante la entonces Secretaría de Comercio y Fomento Industrial para solicitar el inicio de la investigación administrativa en materia de prácticas desleales de comercio internacional en su modalidad de discriminación de precios y la aplicación del régimen de cuotas compensatorias sobre las importaciones de urea, originarias de los Estados Unidos de América, de la Federación de Rusia y de la República de Letonia, independientemente del país de procedencia.
La empresa manifestó que en el periodo comprendido del 1 mayo de 1997 al 30 de abril de 1998, las importaciones de urea originarias de los Estados Unidos de América, de la Federación de Rusia y de la República de Letonia, se efectuaron en condiciones de discriminación de precios, las cuales han causado daño a la producción nacional de mercancías idénticas o similares.
Más allá de su triste pasado, hoy se vislumbra un nuevo futuro para el campo mexicano, al retomar su objetivo: la elaboración, transformación, maquila, compra, venta y distribución de toda clase de productos petroquímicos, químicos orgánicos, en especial de fertilizantes y entre éstos los derivados del gas natural, ácido fosfórico, ácido nítrico y ácido sulfúrico, de las materias primas para la elaboración de dichos productos químicos orgánicos e inorgánicos y su utilización.
Y es que con esta operación, Pemex, como lo señaló en su comunicado, cumple su compromiso con el campo mexicano, el Plan Nacional de Desarrollo y con las iniciativas del Presidente Peña Nieto de un México Prospero.