Defienden regidores priístas obra construida sin permiso de Ferrosur

CÓRDOBA, Ver.- 31 de marzo de 2014.-  Regidores del PRI en el ayuntamiento de Córdoba exigieron al representantes legal de la administración municipal, el síndico Luis Alberto García, asuma su papel de defensor de los intereses de la ciudadanía, ante el caso de la sentencia del Juzgado decimo Sexto, solicitando al ayuntamiento devolver la posesión del derecho de vía a Ferrosur, por haber construido una vialidad (lo que ahora es el circuito San Nicolás-Miraflores) sin los permisos correspondientes.

En conferencia de prensa, los regidores Ernesto de Gasperín, Ricardo Navarro, Mirna Puertos y Humberta Solís, acompañados del exregidor y actual dirigente del PRI, Octavio Lara Báez, defendieron la obra de pavimentación que efectuó la pasada administración, encabezada por Francisco Portilla Bonilla, por 7 millones de pesos, sobre el derecho de vía propiedad de Ferrosur.

La edil Mirna Puerto dijo que era lamentable que la actual administración panista incumpla un deber legal al no promover un recurso contra la sentencia emitida por la autoridad judicial.

La sentencia establece que el ayuntamiento debe devolver a la parte quejosa (Ferrosur) la posesión respectó al derecho de vía concesionado por el Gobierno federal en el tramo al Encinar-Veracruz entre el kilometro S­311 + 930 y el Km. S-312 + 476, con dirección a Veracruz.

Afirmó que la intención del Síndico, el pasado sábado, llevando maquinaria para destruir la pavimentación, se convierte en un exceso  a la sentencia de amparo 703/2013 al no ordenar demolición alguna.

Por su parte la regidora antorchista Humberta Solís, reconoció que la obra era esperada por los pobladores desde hace más de 40 años y que fueron beneficiados un gran número de familias que forman parte de la agrupación que representa, por ello –dijo- no permitirán se destruya esta obra pese al mandato judicial.

Por su parte el exregidor Octavio Lara afirmó que el haber votado hace dos años en cabildo la autorización de obra a Francisco Portilla, fue para ponderar el bien común y la necesidad de la gente por un espacio digno; sin embargo no justificó el por qué la obra se efectúo sin el permiso de Ferrosur.