XALAPA, Ver., 17 de octubre de 2016.- Veracruz no merece tener como gobernador a un hombre que tiene graves señalamientos de corrupción como Miguel Ángel Yunes Linares, el estado no debe estar en manos de una persona con doble moral, señaló el dirigente nacional del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Ochoa Reza.
En un encuentro con la militancia priista del estado, el líder nacional señaló que el Partido Acción Nacional (PAN) sigue encubriendo y solapando a personajes que son unos delincuentes como Martín Orozco en Aguascalientes, Guillermo Padrés en Sonora y Miguel Ángel Yunes en Veracruz, por ello, hizo un llamado a las autoridades para que hagan su trabajo y continúen las investigaciones en su contra.
Ochoa Reza puntualizó que el buen juez por su casa empieza y aseguró que el PRI se encuentra en la era de la transparencia y por ello, dijo a los priistas, “nuestro partido tiene que ser garante de ello y de la rendición de cuentas, el combate a la corrupción va en serio, hasta que los corruptos terminen en la cárcel”.
Reconoció que la imagen del partido y su dinamismo se vieron afectados por múltiples factores, “lo que pasó el 5 de junio fue muy doloroso, pero debemos de seguir adelante. Los errores no los podemos repetir en 2017 y 2018”, dijo al tiempo que reiteró el compromiso y apoyo de CEN para fortalecer al PRI en el estado.
El líder priista destacó la pluralidad política del PRI de Veracruz. “Lo he dicho: la otra cara que nos hace fuerte es la unidad. La unidad no se impone, se construye a partir de la confianza”.
Durante su discurso, aprovechó para anunciar que en próximas semanas se nombrará a un delegado que vendrá a valorar con todos el desempeño del partido. “Vamos a iniciar distintos encuentros con todo el priismo para construir la confianza. Vamos a renovar y actualizar las estructuras partidarias que hagan falta. Las mujeres encontrarán el mejor partido para que participe”.
Finalmente aseguró que postularían a las mejores mujeres para el proceso electoral que está por venir. “Sin Juanitas y sin simulaciones”, aclaró.